- Declaraciones del director general de Confebask, Eduardo Aretxaga, en el Basque Circular Summit
- En los últimos 20 años, el consumo de materiales se ha reducido un 25%, y el volumen de residuos urbanos que termina en el vertedero también ha caído en un 56%.
Eduardo Aretxaga, director general de Confebask, primero por la derecha
2022-11-24
En el marco de la Basque Circular Summit organizada por la sociedad pública Ihobe, dependiente del Gobierno Vasco, el director general de Confebask, Eduardo Aretxaga, ha recordado que “la apuesta de la empresa vasca por la economía circular es total y viene de largo. No se ha generado en los tres o cuatro últimos años como consecuencia de la profusión regulatoria de la UE. La economía circular para la empresa vasca no es una moda, sino parte de la estrategia empresarial medioambiental (hoy la denominamos sostenibilidad) que busca alcanzar mejores cotas de competitividad y posicionamiento empresarial ante los distintos mercados, especialmente, europeo”.
“De hecho, - prosigue Eduardo Aretxaga- la empresa vasca, y en especial la Industria, durante los últimos 30 años ha trabajado intensamente los distintos aspectos medioambientales, tales como la minimización de los residuos peligrosos, la reducción de los residuos no peligrosos, el ecodiseño o la ecoinnovación. Ese trabajo previo, nos permite ahora, en un momento tan crucial para Europa, estar mucho mejor preparados que otras regiones para afrontar los retos de la transición”.
Y así, ha recordado que “desde el año 2000, la economía vasca ha crecido un 26%, mientras que el consumo de materiales se ha reducido un 25%. Asimismo, el volumen de residuos tratados en vertedero también ha caído en un 56%. Estos datos demuestran ese compromiso de las empresas vascas por el medio ambiente. Nuestra economía se está desacoplando del consumo de materiales y la generación de residuos gracias a la economía circular”.
En todo caso, Eduardo Aretxaga también ha querido resaltar que el salto cualitativo que están dando las empresas no está exento de dificultades: “de un lado, hay que seguir trabajando con las pymes, que precisan más ayudas para mejorar sus procesos y presentan, por ejemplo, más dificultades para disponer de personal cualificado. Y, de otra parte, deberíamos intentar agilizar toda la tramitación administrativa (autorizaciones, licencias, solicitud de ayudas…) que en ocasiones resulta complicada de gestionar”.
Eso no quita para que el director general de Confebask haya querido poner en valor la colaboración público-privada en el ámbito de la economía circular, que “nos ha permitido avanzar en conocimiento tecnológico y no tecnológico especializado, que luego las empresas han ido aplicando en sus sistemas productivos y modelos de negocio. Ese trabajo conjunto se ha convertido en nuestra seña de identidad como País”.
Dentro las jornadas de esta cumbre de economía circular celebrada en el recinto ferial de Ficoba en Irun, Eduardo Aretxaga ha participado en una mesa redonda junto a, entre otros, el director general de Ihobe, Alex Boto, la directora general de Aclima, Olga Martín, o la directora general de Neiker, Leire Barañano.
