Agaleus, empresa medioambiental dedicada a la economía circular, construirá su nueva planta en Ortuella (Bizkaia), lo que supondrá un desembolso de 18 millones de euros. En ella se implantarán las últimas tecnologías para mejorar su eficiencia e inteligencia, y se tratarán 120.000 toneladas de residuos al año.

Las empresas vascas, Iberdrola y Siemens Gamesa, además de otras en el Estado como CaixaBank, Telefónica, Enagás, Acciona, Ferrovial, Cellnex, Inmobiliaria Colonial, y Logista han obtenido la máxima calificación del índice anual de acción climática de CDP al figurar en su llamada 'Lista A', en la que se encuentran las 200 mejores compañías del mundo en la gestión del cambio climático de las más de 12.000 valoradas. CDP es una organización sin ánimo de lucro destinada a impulsar, entre empresas y gobiernos, la reducción de gases de efecto invernadero, proteger los bosques y salvaguardar los recursos hídricos.

La constructora vizcaína, Viuda de Sainz está dando un fuerte impulso a sus proyectos del área de promoción industrial con el objetivo de crear nuevos espacios productivos. Actualmente están desarrollando más de 300.000 m2 de suelo industrial en Bizkaia. Un volumen de trabajo que abordan con medios y personal altamente cualificado propios. Viuda de Sainz prioriza en sus proyectos la recuperación de zonas industriales existentes con instalaciones obsoletas o en ruina, evitando así la ocupación de nuevos terrenos que pueden dedicarse a otros usos. Un principio de actuación que se enmarca en la hoja de ruta del Basque Green Deal, alineado con las políticas estructurales comunitarias y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU.

La ‘startup’ vizcaína ha desarrollado la tecnología HECO (High Efficiency Contact), un tipo de reactor para procesos térmicos capaz de procesar todo tipo de residuos, y que ya se utiliza en un proyecto que pretende valorizar todos los termoplásticos complejos de Bizkaia. Para abordar uno de los proyectos en los que se encuentran inmersos en la actualidad están aplicando un proceso de pirólisis a través de la Tecnología HECO. Se trata del desarrollo de una planta de valorización de plásticos mediante esta tecnología, con un rendimiento por encima del 80% en biocombustibles, que pretende, como objetivo final, construir una planta para valorizar todos los termoplásticos complejos de Bizkaia con una capacidad de unas 2.000 toneladas al año.