La multinacional vasca de la automoción, Gestamp, que cuenta con 100 plantas en 24 países y 40.000 empleados, instalará en Araba, en el polígono de Subillabide, a las afueras de Vitoria, en unos terrenos de la sociedad Sprilur del Gobierno vasco, una fábrica conectada, inteligente, virtualizada y escalable, un paso que va más allá de la industria 4.0 y que trata de priorizar los criterios de flexibilidad y cercanía en la elaboración de componentes de automoción para los grandes fabricantes. Según afirma el diario El Correo, la fábrica ocupará la nave de 10.000 metros y su ampliación en una parcela total de 30.000 metros cuadrados para ser el primer centro de producción con esta tecnología de 'fábrica inteligente' que realizará y suministrará varios productos para diferentes fabricantes de vehículos.
La apuesta por Vitoria tiene que ver, ente otras cosas, por la conectividad del polígono con la autovía A1, la cercanía al aeropuerto de carga de Foronda y al apeadero ferroviario de Júndiz. Además, la planta de Mercedes, el principal cliente de las plantas de vascas de Gestamp está a unos cinco kilómetros y la fábrica navarra de Volkswagen a menos de una hora de viaje.