Generalmente, se considera que hay dos tipos de huellas ambientales: las referidas a las organizaciones y las huellas ambientales de los productos o servicios.
La huella ambiental de las organizaciones (HAO) mide el comportamiento ambiental de una organización en todo su ciclo de vida y su objetivo es reducir el impacto ambiental derivado de su actividad.
La huella ambiental de los productos (HAP) calcula el comportamiento ambiental de un bien o servicio a lo largo de su ciclo de vida, teniendo en cuenta también las actividades de la cadena de suministro.