20220923

Iñigo Urkullu dio ayer por sentado que Euskadi podrá recaudar al menos una parte del nuevo impuesto extraordinario que el Ejecutivo de Pedro Sánchez ha anunciado para las empresas del sector energético y para la banca. No dijo cómo lo conseguirá, ese es un tema que está en plena negociación con el Gobierno central, pero sí anticipó que esos fondos servirán para financiar un plan de choque que permita amortiguar los efectos de la inflación y, en especial, el alza de los costes de la energía. El plan «supondrá una inyección de 400 millones» dirigidos a mitigar la subida de los precios, se elaborará en colaboración con las diputaciones y sus líneas generales serán aprobadas a mediados de octubre por el Consejo Vasco de Finanzas. Fue el mensaje central del lehendakari en el Pleno de Política General, la cita anual en el Parlamento vasco en la que el Ejecutivo da cuenta de su gestión en el último año y anuncia también sus planes a corto y medio plazo. ¿Y de dónde saldrán esos 400 millones? De tres fuentes diferentes: del dinero que espera recibir de los nuevos impuestos especiales –quizá se sume también el anunciado ayer sobre las grandes fortunas–, recursos propios de las instituciones vascas y una nueva deflactación de la tarifa del IRPF.

1 Ayudas. Incremento del 10% en las Ayudas de Emergencia Social que compensen la pérdida de poder adquisitivo ante la inflación. 2 Caldera centralizada. Reducir el coste de suministros en el parque de vivienda social, para comunidades con instalaciones centrales. 3 Vivienda social. Incrementar el límite de ingresos para el acceso a vivienda social. 4 Sector de alimentación. Ayudas al sector de alimentación para mitigar el impacto de la inflación en la ciudadanía. 5 Energía. Ayudas de eficiencia energética para compensar la subida de la factura y favorecer el ahorro energético de las familias. 6 IRPF. Una nueva deflactación del IRPF. Entraría en vigor el 1 de enero de 2023 con objeto de atenuar la inflación subyacente prevista. 7 Empresas. Línea de crédito especial para empresas intensivas en energía, pymes y autónomos, reforzando el plan de contingencia. 8 Renovables. Ayudas para incentivar el ahorro a través de las renovables en empresas, pymes, autónomas y polígonos industriales.

Urkullu quiso poner sobre todo el foco en «los presagios que se ciernen sobre la seguridad en Europa, la sostenibilidad de nuestro planeta, la carestía de la vida o la subida de los precios de la energía». En una intervención en la que se esforzó también en destacar el valor europeísta de Euskadi, el lehendakari se mostró convencido de que la única manera de enfrentarse a «los graves problemas y amenazas que afectan a toda la sociedad» es a través de un «esfuerzo común». Y en una clara llamada a la oposición, planteó cinco «grandes acuerdos de país»: la aprobación de los Presupuestos del año que viene, un plan de atención primaria en Sanidad, uno educativo, una estrategia para afrontar el reto demográfico y un pacto energético. La respuesta de la oposición fue aceptar su disposición al acuerdo, pero en muchos casos desde premisas tan diferentes que hará difícil llegar a hechos concretos.

El Gobierno empieza a prepararse para una posible rebaja de sus previsiones macroeconómicas para 2023, en un momento en el que los principales bancos centrales del mundo han dejado claro que luchar contra la inflación es prioritario, aunque implique dañar la recuperación. La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, avanzó ayer que la economía española crecerá «en torno a un 2%» el próximo año, lo que supone un recorte de siete décimas a la previsión de julio, y que ya supuso un descenso de ocho décimas respecto a la estimación anterior. Fuentes del Ministerio de Economía matizan que estas palabras de Montero no implican cambios respecto a las estimaciones que en los últimos tiempos ha venido haciendo Nadia Calviño, quien suele referirse a las previsiones de las firmas internacionales y se escuda en la coletilla de «en torno al 2%». No obstante, el Ejecutivo también lleva semanas anticipando que para este 2022 el crecimiento estará «en torno al 4%», cifra que es ligeramente inferior al 4,3% establecido en el cuadro macro.

La economía vasca creció en el segundo trimestre del año algo más de lo pronosticado inicialmente, según la estadística del Eustat. Si el adelanto de la misma en julio apuntaba a que el PIB vasco había repuntado un 0,9% en comparación con el trimestre precedente y un 4,3% en comparación con el mismo periodo de 2021, la revisión y confirmación de las referencias indica que el crecimiento intertrimestral ascendió al 1,1% y el interanual, al 5%, es decir, dos y siete décimas más de los avanzado, respectivamente. Industria y turismo fueron dos de los sectores tractores. El empleo, medido en términos de puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo, por su parte, aumentó en el segundo trimestre del año un 0,8% intertrimestral, lo que supone un crecimiento en términos interanuales de un 3,7%, esto es, un total de 35.525 puestos de trabajo más que el segundo trimestre del año 2021. Este repunte no ha registrado cambios en comparación con el avance publicado en julio. El crecimiento interanual estimado en el segundo trimestre del PIB de Euskadi se sitúa por encima del estimado en la economía de Estados Unidos (1,7%), en la Zona Euro (4,1%) y en el conjunto de la Unión Europea (4,2%).

La facturación de la industria vasca creció un 15,6 % en julio en comparación con el mismo mes del año anterior, un aumento que se encuentra por debajo del incremento de la media estatal que fue del 19,9 %. Según los datos facilitados este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE), este crecimiento sitúa a Euskadi como la décima comunidad autónoma con un mayor incremento interanual de la cifra de negocios industrial. En el acumulado de enero a julio, la industria vasca ha logrado un aumento de su facturación del 27,9 % respecto a los mismos primeros meses de 2021. En el conjunto estatal la cifra de negocios de la industria se incrementó un 19,9 % en julio en comparación con el mismo mes de 2021 y en los siete primeros meses un 23,3 %. Entre las comunidades, únicamente descendió la facturación industrial en Navarra, donde bajó un 8,5 %, mientras que los mayores incrementos se produjeron en Murcia (49,4 %), Comunidad Valenciana (33,5 %) y Andalucía (30,8 %).

CC OO, UGT y LAB han obtenido el respaldo de sus bases para suscribir el convenio del Metal acordado el pasado lunes con la patronal alavesa SEA. Se completa así el último trámite previo a una rúbrica formal del documento que será inminente, aunque todavía no se ha concretado fecha. Las tres organizaciones suman la mayoría suficiente para que el compromiso se aplique con eficacia general. ELA no lo secunda. El nuevo convenio (se activará con fecha 1 de enero de este año y tendrá vigencia hasta el 31 de diciembre de 2025) pone fin a cinco años de vacío y convulsión en el sector. Contempla que el salario mínimo se eleve hasta los 20.445 euros (frente a los 17.480 actuales). Y recoge, entre otras demandas laborales, una subida del 6,5% para el actual ejercicio; del 3% para 2023. Y de cara a 2024 y 2025, incrementos del 2,5 y del 2%, respectivamente. Más de un 15% en el acumulado final. Además incluye una cláusula de revisión salarial que tendría en cuenta los efectos de la inflación. ELA criticó ayer de nuevo el acuerdo a través de un comunicado. 

Doce años al frente de la Cámara de Comercio de Gipuzkoa dan para muchas vivencias, anécdotas y también algún que otro momento complicado. Pedro Esnaola (San Sebastián, 1965) no volverá a presentar su candidatura tras confirmar este pasado miércoles a DV su renuncia a seguir liderando la Cámara del territorio. "En estos doce años he aprendido que cuando analizo un escenario, y este depende de las empresas de Gipuzkoa, las firmas del territorio saben prepararse ante las crisis y son sensatas. Si el escenario que ponemos sobre la mesa depende de cómo actúen las empresas de Gipuzkoa, todos tenemos que confiar en ellas porque así lo han hecho y lo van a seguir haciendo. Nuestras compañías han tenido unos meses para saber lo que viene y se han preparado ante esa posible crisis. Además, saldrán reforzadas.–¿Teme que las empresas más dependientes de la energía se vean obligadas a parar? ¿Podrían tener problemas de solvencia?– Sí, es una posibilidad. Aunque ayer el Gobierno Vasco aprobó una línea de ayuda y de crédito a las industrias para poder enfrentarse a ese encarecimiento de la energía sin tirar de sus propios recursos. En otros países de Europa ya se está haciendo y sería un grave error no aplicarlo aquí, puesto que restaríamos competitividad a nuestras compañías. Pero no solamente las empresas están sufriendo con sus facturas eléctricas, también los pequeños comercios..."

Así se desprende del Observatorio Trimestral del Mercado de Trabajo, publicado ayer por el Instituto EY-Sagardoy de Talento e Innovación, BBVA Research y Fedea. «Los datos del segundo trimestre muestran claramente una desaceleración y los datos del registro de afiliación de los meses de julio, agosto y la primera quincena de septiembre anticipan cierto estancamiento en el número de cotizantes», advirtió Rafael Doménech, de BBVA Research. Tanto el crecimiento de los ocupados como de las horas trabajadas se moderaron entre abril y junio. Así, y pese a que la afiliación está en máximos y se han ganado más de 650.000 cotizantes respecto a 2019, los datos de julio y agosto anticipan un estancamiento del número de afiliados en el tercer trimestre, en sintonía con la desaceleración de la economía. Esto sucede cuando las horas trabajadas , los puestos de trabajo equivalentes a jornada completa y la productividad siguen sin recuperar los niveles previos a la crisis sanitaria. Otra de la sombras es un freno al impacto que estaba teniendo la reforma laboral en su impulso hacia la contratación indefinida. Pese a que el empleo fijo se sitúa en máximos históricos y la temporalidad ha caído a mínimos, el peso de los contratos temporales ha vuelto a repuntar unos 10 puntos desde que alcanzara mínimos en abril. De igual manera, se aprecia una notable desaceleración de la contratación indefinida ordinaria en junio y agosto. Este freno se percibe especialmente en la modalidad del fijo discontinuo, e incluso desde junio se observan variaciones negativas en su afiliación. Sugiere que muchos de estos contratos se han rescindido o entrado en período de inactividad. Asimismo, es un reflejo del progresivo aumento de las tasas de baja en afiliación de los trabajadores con contratos indefinidos.

BBVA pronostica un estancamiento de la economía en el tercer trimestre del año, con un crecimiento de apenas un 0,1% respecto al segundo trimestre del año. Así lo manifestó ayer Rafael Doménech, responsable de Análisis Económico de BBVA Research. Domenech intervino en la presentación del Observatorio sobre el mercado de trabajo, correspondiente al segundo trimestre del año, elaborado por el servicio de estudios del banco junto a la Fundación Fedea. El experto detecta “señales de ralentización en la creación de empleo”, lo que puede provocar un “cierto estancamiento” en el mismo, ya en el actual trimestre. “Un dato que es consistente con el estancamiento del Producto Interior Bruto” entre julio y septiembre. El pronóstico de BBVA de estancamiento de la actividad económica en el tercer trimestre supondría también una fuerte desaceleración de la actividad económica, como se aprecia en el gráfico. Máxime, cuando en el segundo trimestre el PIB aumentó un 1,1% respecto al primer trimestre por la recuperación de la economía tras la pandemia. Además, contrasta con el hecho de que el sector turístico ha registrado un verano con plenitud de actividad, gracias a que tanto los extranjeros como los españoles han reanudado los viajes de vacaciones, tras los duros años de la pandemia.

El conflicto en la estiba del Puerto de Bilbao, que culminó con una huelga feroz en 2020, ha penalizado a la dársena, pero ahora puede ser una ventaja competitiva por el convenio laboral firmado para seis años: «Ninguna otra terminal tiene un pacto tan duradero». Este es el mensaje que lanzaron ayer tanto empresas como sindicatos y Autoridad Portuaria en una comparecencia conjunta inédita para trasladar esa imagen de unión y atraer a nuevos clientes o a los que se hayan marchado. El presidente de la Autoridad Portuaria, Ricardo Barkala, aseguró que ya se han recuperado tráficos gracias «al buen servicio que está dando la estiba» una vez restaurada la paz. Lo que huyó en el segmento de contenedores ha regresado y lo mismo ocurre con los productos siderúrgicos, con excepciones como Tata Steel, que se marchó a Pasaia. El acuerdo, que rechazaron ELA y LAB y respaldaron el 75% de los 300 estibadores en plantilla, implica un sacrificio para los trabajadores, con una quita de 850.000 euros y una congelación de sueldos hasta 2024. «Hemos firmado por responsabilidad», señalaron los representantes de Coordinadora y UGT. El expresidente de Cebek Iñaki Garcinuño, que actuó de moderador, criticó la «irresponsabilidad de ELA y LAB de no firmar» y Barkala dijo que «les ha faltado valentía».

Horas antes de que se resolviera sin avances la reunión sobre el Pacto de Rentas que tuvo lugar el miércoles en el Ministerio de Economía, representantes de la patronal y de los sindicatos se encontraron en un foro organizado en Madrid, y en el que participaron también miembros de la Comisión Europea. En uno de los bloques del evento, donde se abordaba la resiliencia de la economía española, Rosa Santos, directora del departamento de Empleo, Diversidad y Protección Social de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), consideró innecesaria la necesidad de definir un pacto salarial a nivel general, apelando al éxito de las renovaciones que están teniendo lugar en las últimas semanas de distintos convenios colectivos, donde se están determinando subidas que repercutirán sobre más de siete millones de trabajadores. Santos confrontó así los ataques de los representantes de los trabajadores hacia la patronal, a la que acusaron de “cerrazón” en las negociaciones para renovar el Acuerdo para la defensa del Empleo y la Negociación Colectiva (AENC), caducado desde 2020.

La economía alemana es, por su dependencia energética de Rusia, una de la más expuestas a la espiral alcista de los precios del gas, lo que en términos de PIB supondrá una abultada factura. El ministro alemán de Economía, Robert Habeck, advirtió ayer que sólo el encarecimiento del precio del gas podría costarle a Alemania un 2% de su PIB entre este año y el que viene. Esto es, la economía alemana perderá en 2022 alrededor de 60.000 millones por la compra de energía de fuentes alternativas tras el corte de suministro de gas ruso, cifra que el año que viene podría catapultarse hasta los 100.000 millones, afirmó Habeck en un congreso de la Federación de la Industria Alemana (BDI). Un zarpazo al motor económico alemán, hoy gripado, que, según el ministro, se dejará sentir “en todos los ámbitos”. El Bundesbank prevé la entrada en recesión de la economía alemana este mismo invierno, con una leve contracción en el tercer trimestre y de forma más acusada en el cuarto y primero de 2023. Ante este sombrío horizonte, Habeck cree necesario un plan de inversiones para preservar “la sustancia económica” del país. A su juicio, son precisas medidas de apoyo adicionales para proteger la economía con instrumentos de política fiscal, ya que considera que las que ha adoptado hasta ahora el Ejecutivo de coalición son insuficientes. 

Irún tendrá los dos propulsores que alimentan el gasoducto vasco a pleno rendimiento desde noviembre. La medida supone aumentar la capacidad del ‘Euskadour’ con Francia un 70%, pasando de los actuales 2,1 bcm a 5,3 bcm. Con esta actuación, el VIP Pirineos, la infraestructura que une a España con el hexágono por Irún y por Larrau (Navarra), eleva su capacidad un 18% y alcanza los 8,9 bcm, el equivalente a un flujo de 9 buques gaseros al mes y al 6% del consumo francés. Se trata de una operación anunciada ya por el operador de gas del Estado, Enagás, pero que ayer en Irún superó las últimas pruebas con la presencia de la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, y del consejero delegado de Enagás, Arturo Gonzalo. Euskadi cobra así importancia en la estrategia de distribución y almacenaje de gas que diseña España y que, en la medida en que cuenta con el 35% de la capacidad de regasificación de la UE, se hace clave para Europa.

Iberdrola concurrirá en los próximos meses en Francia a tres subastas de nueva generación de eólica marina con una capacidad global de 1.650 MW. El grupo que preside Sánchez Galán presentará una oferta por la licencia de 1.000 MW para instalar un complejo de offshore frente a las costas de Normandía. También en la Bretaña francesa licitará por otros 250 MW. Por último, la eléctrica pujará por dos parques de eólica flotante en el Mediterráneo, con una potencia de 200 MW cada uno. Por otra parte, Iberdrola mantendrá su plan de inversiones de 15.000 millones en Estados Unidos hasta 2025, según comunicó su filial en este mercado, Avangrid, durante la celebración en la ciudad de Nueva York del Capital Market Day. La mayor parte de ese presupuesto, unos 13.000 millones, el 88% del total, irá destinada al desarrollo de redes inteligentes en este mercado. Con el refuerzo en el ámbito de las redes, Avangrid calcula que tendrá en 2025 unos activos regulados con un valor de 22.000 millones. En relación con el negocio renovable, la filial de Iberdrola invertirá 1.800 millones, el 12% del total del plan citado en los próximos tres años. Con ese esfuerzo ganará 1.100 MW de capacidad. Si cumple estos objetivos, la multinacional española logrará en 2030 la neutralidad en carbono en las emisiones de alcance 1 (vertidos directos por la actividad) y 2 (la contaminación indirecta).

La producción de coches en las fábricas españolas superó con contundencia en julio y agosto los resultados de 2021 y dio muestras de una inicial recuperación. Sin embargo, la mejora es por el momento muy incipiente y puede verse interrumpida por los nuevos problemas de suministro en las plantas, las amenazas de recesión y la escalada de costes energéticos. Según las cifras ofrecidas ayer por la asociación de fabricantes Anfac, VW, Stellantis, Renault y Ford produjeron en las plantas españolas 152.351 vehículos en julio, un 8,3% más que en el mismo mes de 2021, y 111.824 en agosto, un 65,6% más. Agosto suele ser un mes de parón, con cierres vacacionales en muchas unidades de producción, aunque este año la tónica ha sido distinta. Estos resultados sitúan la producción en 1,39 millones de unidades en los ocho primeros meses del año, apenas un 1% menos que en el mismo periodo del ejercicio anterior. El año está yendo de menos a más, pero Anfac avisa de que es “pronto” para hablar de recuperación. Persisten los problemas de suministro de chips y las tensiones geoestratégicas. “Los anuncios recientes de nuevas paradas de producción indican que hay que esperar a la evolución en los próximos meses para poder afirmar que la recuperación se confirma”, señalan los fabricantes de vehículos.

La gran distribución española superó los 40.000 millones en ingresos al cierre del ejercicio 2021, un crecimiento del 9,7% con respecto al año anterior, según los datos recopilados por Anged, la patronal del sector y que representa a una veintena de empresas, entre ellas El Corte Inglés, Carrefour, Leroy Merlin o Ikea. En concreto, 40.042 millones facturados, que casi igualan la cifra que generaba el sector antes de la pandemia, 41.423 millones, con lo que la recuperación alcanza el 96,6%. Según Anged, “la flexibilidad de las empresas para adaptar productos, operaciones y canales de venta a una nueva realidad del consumo” permitió el avance. El principal reflejo de esa nueva realidad es que el número de compradores online se ha duplicado en dos años. En la clausura de la asamblea del sector, el presidente de CEOE, Antonio Garamendi, reabrió el debate sobre el precio de los alimentos, y volvió a referirse a las intenciones de la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, de establecer acuerdos para limitar los precios en algunos productos de la cesta de la compra. El empresario, que ya se refirió a la propuesta como “programación soviética”, insistió en su crítica, acusando a Díaz de promover un “cártel”. “Es increíble que en un país de libre mercado hayamos tenido que poner la voz en alto para que la CNMC salga a decir que es no se puede hacer. Y es increíble que un miembro del Gobierno promueva un cártel. Porque querer fijar precios es un cártel”.

El lehendakari, Iñigo Urkullu, anunció ayer en el Parlamento vasco que el Ejecutivo va a impulsar un clúster financiero. Esto es, una asociación dedicada a aglutinar a entidades públicas y empresas privadas que tienen alguna relación con ese sector, de igual forma que existen grupos de este tipo vinculados a la actividad del automóvil, la energía y automoción, entre otros. Son asociaciones que no actúan con un objetivo de representación, sino para fomentar la colaboración y propiciar actuaciones conjuntas entre ellas. Tienen importantes subvenciones de la Administración vasca para sus gastos de funcionamiento. Urkullu señaló que en este clúster se integrará el Instituto Vasco de Finanzas, el organismo dependiente del Ejecutivo vasco que actúa ya como principal responsable de las inversiones públicas en empresas y también de las ayudas financieras al sector privado. También nombró a fundaciones bancarias –en el País Vasco existen tres, BBK, Vital y Kutxa–, Elkargi, sociedades de capital riesgo e incluso sociedades patrimoniales de inversión. El impulso a la creación de este clúster está vinculado al deseo de buscar soluciones a una de las debilidades que tiene en estos momentos la economía vasca: un déficit de inversores que garanticen el arraigo de las empresas que son estratégicas por su influencia en el desarrollo económico del entorno.

La mayoría de los negocios de Álava ha dejado para última hora la instalación del TicketBai. Sólo 3.615 de las cerca de 23.000 empresas que hay en el territorio histórico –el 15,71%– han dado el paso cuando quedan diez semanas para el 1 de diciembre, fecha de su entrada en vigor obligatoria. Inicialmente se iba a implantar en octubre, pero la Diputación entendió antes del verano que tal vez era demasiado precipitado y se retrasó dos meses más. Nadie prevé más prorrogas y, por eso, se observa un aluvión de solicitudes a las empresas informáticas especializadas en este tipo de facturación que incluirá un código QR para comprobar que el negocio y el cliente han cumplido con sus obligaciones fiscales. Un sistema que tiene como objetivo la lucha contra el fraude. Nadie, ni siquiera Arabadendak –la asociación que más ha levantado la voz a este respecto– discute ese fin. La polémica reside en la necesidad de cambiar su sistema de facturación y la obligación de conectarse a internet incluso en aquellos negocios de mayor solera. Inversiones que pueden suponer desde el simple alquiler de un datáfono hasta la necesidad de instalar el nuevo programa en varias TPV (cajas registradoras digitales) o balanzas, lo que podría disparar el presupuesto por encima de 2.200 euros.

Cuentan altos dirigentes del PNV que cuando Elixabete Etxanobe fue nombrada el año pasado diputada de Administración Pública y Relaciones Institucionales las cartas quedaron marcadas, y su futuro «bastante claro». Era una desconocida para la opinión pública, pero en Sabin Etxea ya tenían su nombre subrayado con un color fosforito. Ayer salió definitivamente del anonimato. El Bizkai buru batzar ha propuesto a sus bases que Etxanobe sea la candidata del partido a diputada general en las elecciones de mayo. Salvo sorpresa mayúscula, la afiliación ratificará en noviembre la designación y la convertirá en la primera mujer que aspire a liderar el Gobierno foral en representación de la formación nacionalista. Es la elegida para tomar el relevo de Unai Rementeria, que no se postulará para un tercer mandato. La presidenta del PNV vizcaíno, Itxaso Atutxa, bendijo ayer a Etxanobe como la «perfecta candidata» tras elegirla entre una terna de aspirantes en la que se incluían al menos otras dos mujeres con mayor experiencia política: una consejera del Gobierno vasco y una alcaldesa –de las que no se ha querido dar nombres–.

Hacienda gravará de forma temporal a las grandes fortunas que consiguen escapar del impuesto sobre el patrimonio gracias a su residencia fiscal. Según explican fuentes conocedoras, lo hará creando un tributo que afecte también a las regiones que bonifican en su totalidad patrimonio, como hace Madrid desde hace años y harán Andalucía y previsiblemente Murcia a partir del ejercicio próximo. La ministra del ramo, María Jesús Montero, pidió ayer en el Congreso un “mayor esfuerzo” a los grandes patrimonios y avanzó que “el Gobierno está trabajando” en la posibilidad de crear un nuevo impuesto especial para los más ricos, en línea con la propuesta de Unidas Podemos. La nueva figura impositiva, de la que todavía no se conocen detalles, entraría en vigor en 2023, una vez que los técnicos del ministerio diseñen su articulado. Según explica el secretario general del Sindicato de los Técnicos de Hacienda (Gestha), José María Mollinedo, “creemos que este impuesto temporal será un gravamen de naturaleza estatal para quitar competencia normativa a las comunidades” y así evitar su supresión. Tampoco habría cesión de esos ingresos a las autonomías, “ya que no tendría lógica darle lo recaudado a una región que previamente ha eliminado el impuesto”. A su vez, con el objetivo de evitar una doble imposición en las regiones que no eliminan patrimonio, “se descontará lo pagado hasta el límite de lo que resulte del gravamen”. Es decir, con esta fórmula los contribuyentes de las comunidades sin bonificaciones no abonarían el tributo dos veces.

La Unión Europea plantea sacudir la economía de guerra rusa. Los ministros de Exteriores de los Estados miembros acordaron ayer impulsar un nuevo paquete de sanciones contra el régimen de Vladímir Putin. Esta decisión llega tras las amenazas nucleares contra Occidente del jefe del Kremlin, su declaración de “movilización parcial” —la primera decretada en Rusia desde la II Guerra Mundial— para engrosar sus tropas en Ucrania y la convocatoria de pseudoreferendos en los territorios ucranios ocupados para anexionarlos a Rusia. Sobre la mesa, dentro del nuevo paquete, se contempla imponer un tope al precio del petróleo ruso —como el acordado por el G-7— y también ampliar el listado de productos de alta tecnología vetados a las exportaciones. La UE busca así dar una nueva vuelta de tuerca en su castigo a la economía rusa y a personas vinculadas a la guerra de Putin contra Ucrania. Los ministros de Exteriores de los Veintisiete acordaron en una reunión de urgencia convocada ayer en Nueva York, donde asisten a la Asamblea General de Naciones Unidas, enviar más armas a Ucrania y plantear un nuevo paquete de sanciones. Pero sacar adelante el nuevo paquete no va a ser sencillo. Horas después de la reunión de Nueva York, el primer ministro Húngaro, Viktor Orbán ha vuelto a salirse de la foto.

Los italianos pueden salir de las elecciones parlamentarias del domingo con una madre, un padre y un abuelo que se ocupen de ellos durante los próximos cinco años. Giorgia Meloni, Matteo Salvini y Silvio Berlusconi, líderes de los tres partidos conservadores que, según todas las encuestas, ganarán ampliamente, pusieron ayer el broche a la campaña con un multitudinario mitin en Roma en el que apelaron a los sentimientos de los ciudadanos: se propusieron como la única alternativa para solucionar sus problemas y devolver el orgullo de un país resignado a vivir desde hace décadas en una perenne decadencia. Prometieron, además, un Gobierno unido. En una Piazza del Popolo tomada por los seguidores de Fratelli d’Italia (FdI, Hermanos de Italia), el partido de Meloni, que encabeza los sondeos, y en la que apenas se veían banderas de la Liga y de Forza Italia, el primero en tomar la palabra fue el veterano líder esta última formación. En una de sus pocas salidas públicas de la campaña, en la que ha preferido centrarse en vídeos para TikTok grabados desde su despacho, Berlusconi agarró el micrófono para presentarse como la voz de la experiencia, el abuelo en el que confiar. No era una mala estrategia: a punto de cumplir 86 años, el cuatro veces exprimer ministro reivindicó su bagaje y, en particular, la «magnífica política exterior» que desarrollaron sus Gabinetes. Fue una manera implícita de decirle a los italianos que pueden estar tranquilos con Forza Italia en el próximo Ejecutivo y que no corre peligro la posición de Italia en la UE y en la OTAN.