El candidato republicano no quiso esperar demasiado para salir a celebrar su triunfo. Lo hizo a las 2.24 horas de la madrugada en Florida (seis horas más en España), una vez que su gran aliado mediático, Fox News, fue el primero en proyectar el resultado final, y mientras los simpatizantes demócratas plegaban velas en Washington tras la cancelación del discurso de Kamala Harris. El magnate neoyorquino cruzó el telón azul al ritmo de ‘God Bless the USA’, el tema del cantante country Lee Greenwood que se ha convertido en su himno de campaña, y desplegó un discurso eufórico sin ahorrar en épica: «Hemos hecho historia». Trump se mostró hasta sorprendido por el alcance de la victoria al extenderse al Senado y la Cámara de Representantes: «Nadie lo esperaba, nadie». Un control total que otorga a los republicanos «un mandato poderoso, sin precedentes» para desarrollar su proyecto de regreso a las raíces norteamericanas. «Vamos a darle la vuelta a este país. Vamos a sanarlo porque necesita ayuda urgentemente, arreglaremos las fronteras, lo arreglaremos todo y haremos este país mejor que nunca», prometió el presidente electo. En una de sus mayores grandilocuencias, dibujó el inicio de «una era dorada». «Voy a pelear por vosotros, por vuestras familias y vuestro futuro, con cada soplo de mi cuerpo. No voy a descansar», insistió ante los suyos. Entre insistentes referencias al liderazgo mundial de Estados Unidos –«somos el país más grande con diferencia»–, Trump incluso se llegó a arrogar un mandato divino. «Dios me perdonó la vida por un motivo: para que yo salve América», dijo en referencia al intento de asesinato que sufrió el pasado julio durante un mitin en Pensilvania. Esa supuesta orden celestial, reconoció, «será difícil», pero aseguró que la tratará de cumplir bajo el mismo lema que en su primer ciclo: «Las promesas que se hacen se cumplen». Entre esas intenciones, destacó uno de sus ‘leitmotivs’, el de la inmigración, en el que habló de «sellar las fronteras».
20241107
Jueves, 7 de noviembre de 2024
Núm 1777/2024
Año XXXVII
Trump vuelve más fuerte: «Vamos a darle la vuelta a este país, lo sanaremos y lo haremos mejor que nunca» (El Correo, El País, El Mundo, Expansión)
El cambio de bando histórico de las minorías (El Mundo)
El voto latino ha acabado resultando clave, pero para Donald Trump. No ha habido oleada azul de feministas ni legiones de hispanas acudiendo a las urnas, espoleadas por la causa de los derechos reproductivos o la ansiada reforma migratoria, al menos no con la suficiente fuerza como para influir en el resultado electoral y darle una victoria a Kamala Harris, como era el sueño de millones de mujeres por todo el país. El vuelco de una masa social tradicionalmente asociada a los demócratas es ya parte de las claves que explican la vuelta de Trump a la Casa Blanca para un segundo mandato y de una forma tan arrolladora. Aún es pronto para conocer al detalle el comportamiento del voto latino en los 50 Estados del país, pero el cambio de tendencia parece evidente. De acuerdo a varias encuestas a pie de urna, Trump se ha llevado el 45% de esos sufragios de costa a costa, aún por debajo de Harris (con el 53%) pero muy por encima del 32% que se adjudicó en 2020, cuando cayó derrotado por Joe Biden. Y eso que no faltaron las provocaciones a esa minoría, especialmente en el último mitin en Nueva York de su campaña, donde un comediante les acusó de no tener más afán que el de tener hijos y donde se cebó especialmente con los portorriqueños, a los que tachó de basura. El arranque de furia de muchos isleños se antojaba clave en estados bisagra como Pensilvania o Carolina del Norte, con el apoyo de Bad Bunny, Jennifer López y otros conocidos artistas isleños, aunque al final no se notó la diferencia para Harris. Consultados al respecto, muchos votantes de origen latinoamericano le quitaron hierro al asunto y se mantuvieron firmes en su apoyo al republicano. De ahí el 54% de apoyo de varones hispanos al magnate neoyorquino. Quieren que los precios vuelvan a estar como estaban hace cuatro años, antes de la inflación derivada de la pandemia y la guerra en Ucrania. Pero no solo fueron los hispanos. Al efecto Trump se sumaron otras minorías como los afroamericanos e incluso los asiáticos, tradicionalmente más afines al Partido Demócrata que al ideario conservador. Con la población negra en particular, la evolución de Trump ha sido notable en estados como Michigan o Pensilvania, golpeados por la subida de precios y el incremento de la canasta básica familiar. La campaña de Harris esperaba un mayor apoyo en condados clave de esos estados bisagra, especialmente en los suburbios de grandes zonas urbanas, pero Trump parece convencer más como gestor económico que su rival, la ex senadora por California.
El impacto en nuestra economía puede ser negativo... o todo lo contrario (El Correo)
No son pocos los que apuntan que el futuro de la guerra de Ucrania es el eje sobre el que se puede construir un «escenario central» para determinar ese impacto. Por extraño que parezca, el final de esa guerra –algo en lo que Trump ha anticipado que se va a empeñar de forma inmediata–, tendría una decisiva influencia en muchos sectores industriales europeos y en especial en la economía vasca. Un final a la coreana –las trincheras se convierten en las nuevas fronteras– haría que de nuevo el gas ruso fluyese en Alemania. Y a partir de ahí... el cuento de la lechera. La industria germana se quitaría de encima la principal losa que tiene en la actualidad y que son los elevados costes energéticos, volvería a actuar como locomotora europea, recuperaría al menos parte de su pujanza en la industria del automóvil y de ello se beneficiaría la economía del País Vasco. Algo más de una cuarta parte del PIB industrial vasco depende de ese sector de forma directa y hay un porcentaje adicional también importante –el relacionado con la máquina herramienta ligada a la automoción– que mira con ansiedad lo que está por venir.Hay una empresa concreta en el País Vasco, Tubos Reunidos, que fue el paradigma del sufrimiento en la primera temporada de ‘Trump en la Casa Blanca’. Vendía en Estados Unidos el 40% de la producción que salía de su planta de Amurrio y sus ventas se hundieron cuando la Administración norteamericana aplicó un arancel en frontera del 25% a todos los productos extranjeros de acero. Biden no derogó el arancel, sino que lo modificó concediendo una pequeña cuota de importaciones exentas del arancel. En el entorno de la empresa alavesa no hay una excesiva preocupación, pese a que Trump ha prometido aplicar un arancel mínimo del 10% a todos los productos que pretendan entrar en el país. Es un elemento negativo pero hay otros positivos que pueden compensarlo. Entre ellos el alza de precios que ya se ha registrado en ese mercado o un hipotético impulso del nuevo Gobierno a la explotación de hidrocarburos, el sector al que se dirige la mayor parte de las ventas de esta compañía. Por otra parte, el programa de incentivos fiscales para animar las inversiones en la transición energética –que ha sido la palanca sobre la que algunas empresas españolas como Iberdrola, Acciona o Repsol han apoyado sus apuestas en Estados Unidos– puede sobrevivir de la misma forma que lo hizo el ‘Obamacare’ –el programa de salud popular– al primer mandato de Trump. El 60% de las inversiones se han hecho en estados de mayoría republicana y, apuntan, «no solo es generación de electricidad. Ahí hay mucha industria implicada. Eso también es ‘Make America Great Again’», matizan. De ahí que estas empresas no vean en peligro sus inversiones ni tampoco sus proyectos de futuro. Al contrario. Lo que se intuye ya como avalancha de inversiones en digitalización, Inteligencia Artificial y centros de datos va a demandar mucha electricidad. Un buen caldo de cultivo para empresas vascas que tienes factorías allí y producen bienes de equipo eléctrico, como es el caso de Ingeteam y Siemens Gamesa. La industria del automóvil es la que más dudas suscita.
Los aranceles de Trump forzarán a las empresas de Gipuzkoa a implantar más fábricas en EE UU (Diario Vasco)
Las empresas de Gipuzkoa ya miran de reoja hacia Estados Unidos después de la victoria de Donald Trump en el país norteamericano. Fue la Cámara de Comercio la que ayer, en la presentación del Informe de Perspectiva Empresarial, advirtió de que el triunfo del republicano supone «un factor de incertidumbre mayor» para el tejido empresarial del territorio. En el programa económico que plantea Donald Trump propone imponer aranceles de entre el 10 y el 20% a todos los productos procedentes de cualquier país del mundo. A esto hay que añadir el incremento de los aranceles a los productos chinos del 60%. Estos aranceles se sumarían a los que ya puso Biden al gigante asiático, incluido el del 100% para los vehículos eléctricos. Estas políticas arancelarias impactarían directamente en la actividad de las empresas que exportan a Estados Unidos, pero no tanto a las que están allí ya instaladas, puesto que pueden acceder a muchas líneas de ayuda que lanzó la Administración del presidente Joe Biden con la Inflaction Reduction Law (IRA, por sus siglas en inglés). Una inyección a la industria por valor de 350.000 millones de dólares en ayudas fiscales enfocadas a la transición energética. Si Trump finalmente cumple con su programa, las empresas guipuzcoanas «tendrán que analizar una mayor implantación de fábricas allí», señaló el director general del órgano cameral, Javier Zubia, aunque llamó a la calma al asegurar que «todavía es pronto» para conocer cómo va a impactar la posible política arancelaria de Trump. Alrededor de 239 empresas vascas son las que mantienen operaciones de modo estable con Estados Unidos y, además, un centenar cuenta allí con instalaciones y centros de producción. Entre ellas hay firmas como CAF, Tubacex, Tubos Reunidos, o las de automoción, como Gestamp y Cie Automotive. La presencia es, precisamente, una de las condiciones que el Gobierno estadounidense ha impuesto para acceder a muchas de las líneas de ayuda del IRA. Los dos gigantes vascos de la automoción, Gestamp y Cie Automotive, tiene en Estados Unidos un total de 20 fábricas, 15 y 5 respectivamente, y facturan allí un total de 3.381 millones.
La automoción y la máquina-herramienta prevén un 2025 «más complicado» (Diario Vasco)
El Informe de Coyuntura Económica en el que han participado cerca de 400 organizaciones empresariales del territorio constata que las compañías guipuzcoanas «confían en mantener un nivel de actividad similar en 2025». Así, ocho de cada diez empresas encuestadas estiman que su cifra de negocio se mantendrá o crecerá el año que viene, y sólo el 17% de las empresas cree que sus ventas se reducirán. El panorama no es tan alentador para varios subsectores de la industria guipuzcoana, que augura una reducción del 21% en su cifra de negocio para el 2025, frente al 24% de este presente ejercicio. «Apreciamos caídas de la demanda en subsectores manufactureros de Gipuzkoa para el próximo año. Se trata de determinados sectores industriales con una dependencia directa del mercado europeo que está sufriendo más que el resto». La automoción es uno de ellos, ya que atraviesa «problemas estructurales graves y anuncios relevantes de caídas de producción, aunque también hay otros subsectores industriales afectados más cercanos a la maquinaria o al sector del papel y el embalaje». A pesar de la debilidad de los principales clientes europeos de las empresas de Gipuzkoa, la Cámara de Comercio prevé una razonable actividad exportadora en el tejido empresarial del territorio gracias a la «diversificación de los mercados». Según la encuesta, el 84% de empresas del sector industrial muestra su confianza en mantener o aumentar sus ventas internacionales, y solo el 16% prevé una reducción. Los dos condicionantes de la actividad económica que mayor preocupación causan a las empresas de Gipuzkoa son los costes laborales y los márgenes de rentabilidad
Acerinox, ACS y Gestamp ganan con el giro proteccionista en EEUU (Expansión)
La principal conclusión a sacar, viendo las reacciones en Bolsa de las empresas españolas a la victoria de Trump, es que, entre las empresas españolas con intereses en EEUU hay dos clases diferenciadas: las que se pueden beneficiar de una política proteccionista y las que no. En el primer saco se encuentran firmas como Acerinox, Gestamp, Cosentino, ArcelorMittal, Antolin o Cie Automotive, que tienen una fuerte presencia industrial en EEUU, por lo que cualquier regulación enfocada a proteger la fabricación de productos en el país tendrá efectos positivos sobre su negocio. También se beneficiarán fuertemente de la llegada de Trump a la Casa Blanca las compañías de Defensa españolas, ante la apuesta del nuevo presidente por aumentar al 3% del PIB los presupuestos para Defensa entre los países miembros de la OTAN. En un punto intermedio se sitúa el sector de la construcción, con empresas como ACS, Sacyr, OHLA y Ferrovial, que independientemente del color del Gobierno, han cerrado históricamente numerosos contratos en el país de diferente índole. En este punto también se encuentra Grifols, que aguarda conocer el posible nuevo sistema de evaluación de medicamentos impulsado por Trump. Entre los sectores que, a priori, se verían más afectados por el nuevo Gobierno serían las renovables. Iberdrola, Naturgy o Repsol cayeron ayer en Bolsa por la incierta política energética de Trump. En el consumo, la inquietud es máxima, ante el más que posible aumento de los aranceles a productos como el vino o el aceite de oliva. Gestamp, Cosentino y Cie sacarán provecho del ‘made in USA’. Acerinox, ArcelorMittal y Tubacex, presencia histórica.
Iberdrola, Acciona, Repsol y Naturgy, del IRA de Biden a la ira de Trump (Expansión)
Varias compañías energéticas españolas, sobre todo Iberdrola, Acciona Energía, Repsol, Naturgy y Grenergy, entre otras, se juegan miles de millones de inversión en Estados Unidos, uno de sus focos estratégicos en los últimos años. Todas ellas han comprado activos que ahora tienen que rentabilizar. La política energética que pueda poner en marcha Donald Trump como futuro presidente de Estados Unidos es toda una incógnita. Más allá de lo que ya hizo en su primer mandato –poco amigo de las renovables, con declaraciones estrambóticas como que los aerogeneradores producían cáncer–, poco o nada se sabe. En los últimos meses, Trump ha repetido la frase “drill, baby, drill” –perfora, baby, perfora–. Aunque la frase no es suya, Trump se la apropió como síntesis de su apuesta por ampliar la explotación de los recursos de petróleo y gas de Estados Unidos. Pero que defienda los hidrocarburos no quiere decir que reniegue de las renovables. Sobre todo ahora que es consciente de que muchos estados de EEUU –demócratas y republicanos– apoyan las energías verdes como vía de creación de empleos. Desde su primer mandato como presidente, entre 2017 y 2021, el panorama ha cambiado mucho. Su ira y aversión hacia las renovables se topa ahora con una energía en pleno crecimiento en EEUU. El antecesor, Joe Biden, supo encontrar una fórmula mixta de impulso a la economía verde sin renunciar a los recursos de hidrocarburos del país. Su ley de la Reducción de la Inflación (Inflation Reduction Act, IRA), de 2022 fue su obra legislativa maestra para frenar la inflación mediante, entre otras cosas, la inversión en la producción de energía doméstica al tiempo que promovía la energía limpia.
La actividad industrial vasca se redujo un 0,4% en septiembre (El Correo)
La producción industrial vasca se redujo un 0,4% interanual durante el mes de septiembre, según el índice que elabora el Instituto Vasco de Estadística, Eustat. El ámbito de la energía registró el mayor descenso, de hasta un 8,7%, mientras que los bienes de consumo perdieron un 1,1%. Especialmente se redujeron los bienes de consumo duradero, como la fabricación de muebles y aparatos domésticos, que se dejaron un 5,1% respecto al mismo mes de 2023. Los no duraderos como la alimentación, la limpieza, la higiene o la confección de prendas de vestir perdieron únicamente un 0,2%. El Índice de Producción Industrial (IPI) de Euskadi mostró en cambio un crecimiento del 4,2% en la producción de los bienes de equipo. Este sector incluye desde la fabricación de vehículos de motor a la construcción de locomotoras, el material ferroviario, la aeronáutica o la fabricación naval. Bajan, sin embargo, los del ámbito de los bienes intermedios, como la metalurgia o la fabricación de productos metálicos, se dejaron en septiembre un 1,8%. El índice general creció en Gipuzkoa, donde subió un 2,6%, aunque cayó tanto en Bizkaia como en Álava: un 2,3 y un 2,2%, respectivamente.
Gipuzkoa tira de la industria vasca (Noticias de Gipuzkoa)
La industria guipuzcoana acumula en los tres primeros meses del año un crecimiento de dos puntos porcentuales en comparación con el mismo periodo del año anterior frente a las caídas experimentadas por los otros dos territorios de la CAV, lo que demuestra su capacidad de hacer frente a la difícil situación económica a nivel sobre todo europeo y, tal como ha señalado la Cámara de Gipuzkoa, su facultad para diversificarse con éxito en otras zonas geográficas y otros mercados. Esta buena evolución que reflejan los datos facilitados por el Instituto Vasco de Estadística Eustat se deben, en gran medida, a las dos actividades con más peso en el sector industrial guipuzcoano como son la metalurgia, que acumula un ascenso de casi cinco puntos porcentuales, y la maquinaria y equipo con una subida del 4,6%, tal y como destaca la patronal Adegi. Junto con las dos actividades industriales principales en territorio guipuzcoano, otros epígrafes también han tenido una aportación positiva como la fabricación de muebles y otras manufacturas, la industria de la madera, el papel y las artes gráficas y el material de transporte.
Tensión sindical por la jornada que hoy celebra Confebask sobre absentismo (El Correo)
La tensión se eleva ante la jornada que Confebask celebra hoy en Bilbao para abordar el problema del elevado absentismo por bajas médicas en Euskadi, con una media de ausencias por trabajador de 22 días frente a las 16,8 del conjunto de España. Para empezar la cita ha ahondado más en la división sindical puesto que CC OO y UGT, pese a sus diferencias con la patronal en esta materia, han accedido a intervenir en ella, precisamente para dar su punto de vista. Y eso que incluso están molestos con el título que se ha dado a la jornada. Por el contrario, LAB y otras centrales como ESK, Steilas, Ehne o Hiru se manifestarán al entender que se está dando la denominación de absentismo a lo que son derechos laborales. Confebask lleva mucho tiempo tratando de «concienciar» sobre este problema, que aparte de suponer un coste directo de más de 400 millones de euros –y otros 1.000 en prestaciones– «implica una merma de competitividad» para las empresas vascas. Ya consiguió hace más dos años impulsar un grupo de trabajo en el marco del Diálogo Social –eso sí, circunscrito al análisis de la Incapacidad Temporal (IT), no del conjunto del absentismo– para poner sobre la meses un diagnóstico y posibles soluciones. Su presidenta Tamara Yagüe ha insistido en «que no se trata de buscar culpables» sino entender los factores que influyen y hallar soluciones. CC OO y UGT, que participan en el Diálogo Social y, por tanto, en el grupo de trabajo creado para el análisis, han aceptado la invitación a intervenir. Los secretarios generales, Loli García y Raúl Arza, tomarán la palabra en la mesa redonda que habrá después de que Orkestra presente un informe con los datos y su impacto en la competitividad de Euskadi. No obstante, ya han advertido de las diferencias que mantienen, incluso por la terminología.
Euskadi destina 120 millones en un año para el cheque bebé y otras ayudas a la natalidad (El Correo)
De los 357,9 millones que dan forma al proyecto de Presupuestos del Departamento de Bienestar, Juventud y Reto Demográfico, casi la mitad irán destinados a los dos programas estrella diseñados para impulsar la maltrecha natalidad vasca, una comunidad que solo crece gracias a la inmigración. La consejería liderada por Nerea Melgosa (PNV) inyectará 120 millones de euros en el cheque de 200 euros al mes por bebé –que se cobra hasta los tres años– y 53 millones al programa de ayudas a la emancipación juvenil, Emantzipa, solicitado por más de 7.000 vascos desde su puesta en marcha el pasado febrero. Pese a la intención del Gobierno vasco de ampliar la ayuda mensual a la crianza hasta que el niño o niña cumpla los siete años (10 en caso de las familias numerosas o monoparentales), en 2025 la prestación se mantendrá hasta los tres. En su comparecencia, Melgosa aseguró que la medida «se tomará» y que será durante este ejercicio cuando se «ponga sobre la mesa» la modificación del decreto. A la crítica de EH Bildu, que apuntó que «las cuentas no reflejaban una estrategia a largo plazo», la consejera defendió que el Presupuesto «no es continuista» y que busca «hacer frente a la transición sociodemográfica y apoyar a la juventud en sus decisiones y deseo de vivir una vida plena». El Departamento nutrirá el área de Infancia, Adolescencia y Familia, por un lado, y Juventud, por otro, con 224 millones, casi el 63% del total.
Bodegas alavesas y de la Sonsierra riojana se unen en una nueva asociación (El Correo Araba)
Subsierra ya es una realidad. La asociación de bodegas de Rioja Alavesa, Briñas, San Vicente y Ábalos celebró ayer su puesta de largo en la Casa del Cordón, en Vitoria. En ella, los ocho bodegueros que están detrás del proyecto han reiterado su apuesta por la producción ecológica, que será requisito indispensable para formar parte del grupo . Al frente de la iniciativa, el bodeguero Juan Luis Cañas reiteró que «si queremos tener vinos más sanos y más saludables, tienen que ser ecológicos». En Subsierra sólo podrán estar bodegas familiares. «No sirve para una empresa, unos inversores con dinero que compren bodegas, que compren viñas. Aquí no van a poder entrar», remarcó Cañas. La asociación busca ser tractora del desarrollo de la comarca. Los promotores se comprometen a comprar únicamente uva de los municipios en la margen izquierda del Ebro, entre Briñas y Moreda de Álava. Detrás de ello, una idea: superar las fronteras administrativas y aunar fuerzas entre bodegas tanto de Rioja Alavesa como de esos municipios de Rioja Alta entre la sierra de Cantabria y el río Ebro. Subsierra los entiende como un único territorio, con una forma de hacer vino y un paisaje común. «Este es un modelo socioeconómico en el que queremos dar valor a nuestra comarca: desde Briñas hasta Moreda», destacó José Luis ‘Itu’ Ruiz Bañares, productor de San Vicente y, de momento, único bodeguero riojano de la asociación. Según deslizan fuentes de la entidad, son ya varias las bodegas que han contactado con sus integrantes para buscar un hueco. Las llamadas han llegado de viticultores riojanos y alaveses. Sin embargo, habrá que esperar todavía un tiempo para sumar adhesiones al proyecto. Para ello, además, deberán cumplir condiciones como llevar un año transitando hacia la producción ecológica.
Aran Erasun: "Eredu parte-hartzaileagoak elikatu nahi dituzten horiei laguntzen gabiltza" (enpresaBIDEA)
Enara Izagirre Arrizabalagak eta Aran Erasun Urtzelaietak eskualde beretik ezagutzen zuten elkar, hainbat mugimendu sozialetatik, alegia. Coaching ikasketek eraldaketa pertsonalaren bidean murgildu zituzten, biok amatasun fasean zeuden, eta eraldaketa soziala eta pertsonala lotzen dituen leku horretan topatu dute berriro ere elkar. Lehenik, askotariko proiektuetan kolaboratzen (enpresen bidelaguntzan eta formakuntzan) hasi ziren, eta gero lankide egin eta orain bazkide gisa aritzen dira. Enpresak, antolakundeak eta ingurua eraldatzeko duten nahiak eta bizitza bizigarriagoak indartzeko desioak elkartzen ditu. Gehiago irakurri hemen.
El área afectada por la DANA supone el 32% del PIB de la provincia de Valencia (Expansión, Cinco Días, Diario Vasco)
La DANA ha golpeado un territorio con un nutrido grupo de empresas, que tiene 50 áreas industriales. La Cámara de Comercio de Valencia ha elaborado un análisis sobre las grandes magnitudes económicas y empresariales de 68 localidades afectadas, a falta de las tres pedanías de la ciudad de Valencia, de las que no es posible desagregar las cifras. Este informe refleja que –con datos de 2022– el PIB de la provincia de Valencia es de 67.551 millones de euros, y en estos 68 municipios se genera el 32,3%, ya que asciende a 21.819 millones. Si se reduce el análisis a las 32 localidades que constituyen la llamada zona cero, que está más gravemente afectada, el peso de su PIB asciende al 19,7%. La zona estudiada tiene registradas 48.722 empresas según el DIRCE, de las que 4.119 son industriales, 5.998 de construcción y las restantes 38.431 corresponden al sector servicios. En cuanto a su peso en la economía local, la industria genera el 30,1% de la producción –sumatorio de los bienes y servicios producidos en el año–, un peso muy superior al 16% de media que tiene la Comunidad Valenciana. La construcción es el 6,1%, en línea con la media regional, y los servicios representan el 63,8%. Las cifras recopiladas por la Cámara señalan que en estas localidades hay 264.883 empleos en total, pero si se ciñe a los 32 municipios más duramente afectados, en ellos se concentran 220.000 puestos de trabajo, es decir, la gran mayoría. Añade que los sueldos y salarios que perciben estos trabajadores suponen el 24,5% del total de la provincia de Valencia.
El Congreso aplaza al lunes la votación sobre la extensión tres años más del impuesto a la banca (El Correo)
Dada la inestabilidad parlamentaria del Ejecutivo, este no tiene garantizado que vayan a ser aprobadas las medidas. En todo caso, ayer solo se aprobaron enmiendas técnicas al impuesto a las multinacionales –que es una transposición de una directiva comunitaria– dejando para el próximo lunes la votación en la Comisión de Hacienda del resto de propuestas. Será entonces cuando se decida si se prorroga tres años más el impuesto especial a la banca. El PSOE acordó con el PNV modificar este gravamen y convertirlo en un impuesto progresivo (con tipos del 1% al 6%) sobre el margen de intereses y las comisiones de las entidades, de manera que pueda ser gestionado en el marco del Concierto Económico vasco como un tributo concertado. Pero ese pacto es rechazado por su socio de Gobierno, Sumar, y por Bildu, ERC y BNG, que han presentado sus propias enmiendas defendiendo la permanencia del gravamen extraordinario a la banca, pero también el de las energéticas. Este último es el que el Gobierno ha decidido dejar que decaiga a final de año. Su continuidad era rechazada de plano por los independentistas de Junts, ya que ponía en riesgo inversiones de 1.100 millones de Repsol en Tarragona. Podemos tampoco apoyará el proyecto si se intenta sacar adelante librando a las energéticas.
Crisis política en Alemania: El Partido Liberal revienta el tripartito que sustenta el Ejecutivo de Scholz (El Correo, El mundo, El País)
La coalición de gobierno que lidera el canciller federal, Olaf Scholz, reventó ayer en plenas conversaciones para tratar de superar las diferencias entre socialdemócratas (SPD), verdes y liberales (FDP). Una ruptura provocada por estos últimos y que ha culminado con el cese del ministro de Finanzas y presidente del FDP, Christian Lindner. El propio Scholz anunció la medida tras destacar que Lindner había «roto demasiadas veces mi confianza». Ante las crecientes diferencias en materia de política económica, el jefe del Ejecutivo germano comentó haber ofrecido al líder de los liberales varias soluciones para dar continuidad a la alianza, entre ellas mayor apoyo a la economía y más ayudas para Ucrania, pero que el interesado no ha querido ninguna de ellas. «No puedo seguir aceptando un comportamiento así para nuestro país», afirmó Scholz, quien aseguró también que en todo momento trató de ahorrar al país la situación que ha conducido a este desenlace. El canciller socialdemócrata acusó a Lindner de haber bloqueado en los tres años de vida del tripartito numerosos proyectos de ley y afirmó que no existe ya una base de confianza para continuar trabajando con él. Según el jefe del Gobierno de Berlín, al presidente del FDP solo le interesan sus electores y no atiende a razones de Estado para mantener el entente político con sus hasta ahora socios del SPD y Los Verdes.