El nuevo Gobierno vasco y los agentes sociales deberán retomar este curso una asignatura que les ha quedado pendiente: analizar qué ocurre en Euskadi para que sea líder en bajas laborales, con 22 días de media por trabajador, el doble que hace una década y un 31% por encima del conjunto de España, que se sitúa en los 16,8 días. Solo un buen diagnóstico puede llevar a la cura, es decir, a la adopción de medidas que permitan aliviar este problema. Pero responder a esta pregunta tan sensible no resulta nada fácil porque suscita un encarnizado debate entre empresas y sindicatos. De hecho, ya fue un hito que hace dos años se pusiera en marcha un grupo de trabajo, en el marco del Diálogo Social, para analizar las causas y explorar posibles soluciones. Sin embargo, aún no se han cerrado conclusiones. Todas las partes reconocen que Euskadi se sitúa a la cabeza de España en ausencias al trabajo por enfermedad, solo por detrás de Galicia (22,2). Son datos de la Seguridad Social. Pero hablar del porqué supone abrir la caja de Pandora. El colapso generalizado de los sistemas sanitarios tras la pandemia ha hecho que, a escala nacional, patronal y sindicatos pactasen facilitar que las mutuas tengan una mayor participación en las bajas por patologías traumatológicas, siempre que las altas siguiesen dependiendo del médico de cabecera. Este acuerdo debe ser ahora trasladado a cada autonomía y está por ver si se adopta en Euskadi. El PNV apoya la idea pero Bildu la rechaza. «Supone un paso adelante para coordinar a todos los agentes y tratar de que el trabajador recupere antes su salud», defiende Virginia Múgica, responsable del área jurídico-laboral, de Confebask. Fue la patronal la que pidió crear un grupo en la mesa de diálogo social tras alertar de forma insistente de que el liderazgo de Euskadi en absentismo y conflictividad ahuyenta las inversiones. Aparte de la merma de competitividad, las empresas vascas están haciendo frente a un coste creciente. Solo en prestaciones de la Seguridad Social y de las mutuas, que se hacen cargo desde el día 16 de baja, el gasto en Euskadi superó los 1.000 millones el año pasado, un 63% más que en 2019. Todo apunta a que en este ejercicio se encadenará otro récord porque crece a un ritmo del 15%. «Nosotros no queremos encontrar culpables ni criminalizar a nadie. Solo diagnosticar las causas para buscar soluciones porque es un problema que nos afecta gravemente a todos, no solo a las empresas», asegura Virginia Múgica desde Confebask.
20240915
Domingo, 15 de septiembre de 2024
Núm 1727/2024
Año XXXVII
¿Por qué Euskadi tiene un 31% más de bajas laborales que la media? (El Correo)
Los procesos de más de 365 días se triplican en el último lustro (El Correo)
El problema de las faltas al trabajo por cuestiones de salud se ha agravado también al multiplicarse en los últimos años los procesos de más de 365 días. No es un fenómeno que se haya dado solo en Euskadi sino que es generalizado en toda España. Así, en la comunidad autónoma se cerró el año pasado con 7.780 expedientes de baja superior al año, una cifra que representa casi el triple que los registrados en 2019, antes del estallido de la pandemia, según una extrapolación realizada por Mutualia. En el conjunto nacional el número era de 100.734, más de tres veces el dato previo a la pandemia. Este descomunal incremento se debe a que, según explican en la asociación de mutuas, el covid envió al confinamiento a los evaluadores del Instituto Nacional de la Seguridad Social creándose una acumulación de procesos pendientes de resolución que a fecha de hoy no se ha conseguido reconducir, lo que ha generado un embudo. La normativa establece una duración máxima para los procesos de Incapacidad Temporal por Contingencias Comunes (ITCC) de 365 días, prorrogables otros 180 «siempre y cuando el trabajador tenga opción de ser dado de alta médica durante este tiempo». Según esta regulación, el INSS es el único órgano competente para reconocer esa situación de prórroga expresa o bien para determinar la iniciación de un proceso de un expediente de Incapacidad Permanente o bien para emitir el alta médica. Pero, quizás por el colapso, en marzo de 2023 se aprobó, junto a la segunda parte de la reforma de las pensiones, un cambio significativo en el protocolo de las bajas de más de 365 días. Se estableció que ya no tendrán que intervenir los Equipos de Valoración de Incapacidades (EVI) sino que el INSS ejercerá esta competencia a través de sus inspectores médicos.
«Ahora somos una Osakidetza que escucha y busca soluciones compartidas» (El Correo, Diario Vasco)
Entrevista con el consejero de Salud Alberto Martínez. Asegura que su departamento tiene ahora un nuevo talante. «Hemos visto que llegar a acuerdos con los profesionales tampoco era tan difícil». Tratando de evitar el choque, asegura que el actual equipo «escucha a los profesionales» y admite que, aunque el sistema de Salud es «potente y muy efectivo» y ha «funcionado muy bien durante 40 años», hay que «adaptar Osakidetza a unas nuevas necesidades» y a una mayor exigencia social. «La forma de resolver un problema es reconociéndolo y Osakidetza lo tiene». «Los conflictos sólo sirven para retrasar la solución de los problemas». «El sistema falla si hay que esperar un año para una consulta externa de traumatología». «Ahora somos una Osakidetza que escucha y quiere buscar soluciones compartidas». «No he entendido muy bien por qué ELA no ha acudido a la mesa por el Pacto de Salud».
«Osakidetza no ha dejado de contratar a ningún médico por no saber euskera» (El Correo)
Continuación de la entrevista con el consejero de Salud. "La falta de médicos, en especial en Atención Primaria, es una cuestión que preocupa al consejero de Salud, como también el progresivo impacto que tiene el envejecimiento de la población vasca en el sistema sanitario...La falta de médicos todavía va a durar tres o cuatro años, especialmente en la Atención Primaria, porque es menos llamativa para el profesional. En estos momentos, la carencia de facultativos nos lleva a que haya una falta de equidad en la atención, especialmente en las zonas más alejadas de las áreas metropolitanas, porque es más difícil encontrar profesionales para que vaya a cubrirlas...Ningún médico se ha dejado de contratar por no saber euskera. Ninguno. Y podríamos poner ejemplos de las zonas incluso más euskaldunes donde hay médicos que no saben euskera. En estos momentos se contrata a cualquier profesional que esté disponible. El euskera no ha sido una barrera para contratar a facultativos...– El Gobierno vasco reformó la ley en enero para incorporar médicos extracomunitarios, pero solo se ha contratado a diez. – Son pocos. Para trabajar en Europa hace falta el título de médico y el de especialista. Muchos profesionales extracomunitarios no consiguen homologar los dos. Esta es una medida que no ha tenido un buen recorrido y que no esperamos que la tenga..."
«Los vascos somos los que más vamos al doctor de Europa» (El Correo)
El consejero señala que tras la pandemia «nos ha quedado la cultura de que la salud es el derecho más importante y tenemos un nivel de exigencia muy alto». "La demanda asistencial en Euskadi es brutal. Es la frecuentación más alta de todo el Sistema Nacional de Salud y de Europa. Y esto no solo se debe al envejecimiento. Esta afluencia al médico se da en todas las edades...Después de la pandemia nos ha quedado la cultura de que la salud es el derecho más importante, porque nos preocupa, porque estamos muy informados y porque además tenemos un nivel de expectativa y de exigencia muy alto y confiamos en el sistema vasco de salud. Básicamente lo que tenemos es una cultura de ir al médico porque el médico nos da tranquilidad. Vamos más que el resto de Europa...Con el Plan de Salud queremos poner el foco en que debemos actuar sobre los hábitos de vida para disfrutar de una vejez saludable el mayor tiempo posible. En Euskadi tenemos la tasa de muerte por cáncer de pulmón más alta del Estado. También estamos a la cabeza en cuanto a consumo de alcohol y de marihuana. Debemos de ser conscientes de que la salud es una responsabilidad nuestra...Tras la pandemia estamos registrando unos incrementos anuales en torno al 30 o 40% de patologías de ansiedad y depresión. Sin embargo, una cosa curiosa es que consumimos más ansiolíticos y más hipnóticos que en ningún otro sitio de Europa. Con lo cual, o tenemos menos ansiedad y depresión diagnosticadas o las diagnosticamos en otro ámbito que no es el que tiene que ser o están sobretratadas..."
La Seguridad Social mantiene el caos en su servicio de atención a los ciudadanos (El Correo)
La Seguridad Social y más en concreto el INSS, el organismo encargado de tramitar las pensiones y otras prestaciones a empleados y autónomos, no ha conseguido normalizar la atención a los ciudadanos. En algunas de sus oficinas –la situada en el centro de Bilbao es un buen ejemplo–, las largas colas en la calle para la atención presencial son una mala señal. El sistema de solicitud de cita previa, bien por teléfono o a través de internet, se muestra inservible en algunos casos y la posibilidad de realizar trámites sin firma digital –una opción que según la página web de la Seguridad Social es posible–, concluye en un mensaje de «se ha producido un error» que no es casual. Mientras tanto, un portavoz oficial del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones consultado por este periódico asegura que «no hay problema alguno y en todo caso es puntual». La realidad es bien distinta. Aunque el INSS ha flexibilizado el sistema de citas –de ser obligatoria la cita previa ahora se plantea como recomendable–, lo cierto es que hay un notable caos. Desde algunos sindicatos se considera que hay intencionalidad en el desbarajuste. En síntesis, un intento de forzar que los ciudadanos realicen las gestiones por canales digitales y no presenciales. Una estrategia que la banca ya puso en marcha hace años para reducir plantilla y oficinas y que también ha provocado protestas de los clientes.
Los pagos con tarjeta suben en verano pero con menos gasto medio (Diario Vasco)
Así lo confirman los datos de pagos con tarjeta del principal banco en cuota de mercado del País Vasco durante los dos últimos meses. A pesar de que el número de operaciones y el importe de los pagos arroja sendos crecimientos, el gasto medio se ha contraído por la menor inflación (los precios que se pagan son menores) y porque las familias se han apretado más el cinturón. Las operaciones en las que se sacó la tarjeta, el móvil o el reloj inteligente para pagar por parte de clientes de Kutxabank ha subido un 11,3% este verano frente al mismo periodo del año pasado. Con el periodo estival llegando a su fin, esta vía se ha empleado en 30,9 millones de ocasiones hasta sumar un consumo total de 1.099 millones de euros, y arroja un incremento similar (11,5%) al número de operaciones. Casi la mitad de las veces que un vasco ha sacado la tarjeta para pagar –el 42,3%– ha sido para gastar en el comercio minorista y mayorista, y al que se dedicó entre julio y agosto un total de 475,9 millones de euros, un 5,4% más que en el año pasado y el sector con un mayor importe en pagos. Los restaurantes siguen creciendo y ocupan el segundo lugar en número de operaciones al subir un 16,6%, así como el importe pagado en este sector (131 millones), con un alza del 9,7%. Si atendemos ahora al ticket medio de compra en verano, se produce una curiosa paradoja en el consumo vasco. Mientras el importe medio se ha mantenido prácticamente igual respecto a los meses de julio y agosto de 2023, con un tímido incremento del 0,2%, los seis principales sectores de actividad arrojan un descenso de entre el 1,5 y el 11,1%, siendo el ‘resto de ocio’ y ‘hoteles’ donde más baja el gasto medio. Así, el desembolso en hostelería ha pasado de los 25,7 euros del verano pasado a los 24,2 del actual. En el comercio, éste ha pasado de los 37,3 euros de 2023 a los 36,3 de julio y agosto de este presente ejercicio. Expertos consultados por este periódico advierten de que esta situación puede deberse a que, a pesar de que el número de operaciones y los pagos han subido, el consumidor ha mirado más el bolsillo a la hora de hacer un desembolso.
«El consumo crece porque las rentas suben por encima de la pérdida de poder adquisitivo» (Diario Vasco)
El expresidente de Eroski y analista económico, Agustín Markaide, sostiene que el consumo «está caminando muy bien. Los datos que van apareciendo, deflactados del primer semestre, indican un crecimiento en varios sectores». Una de las razones que aduce Markaide sobre esta tendencia alcista del consumo radica en que la renta en manos de los hogares «está aumentado por encima de la pérdida de poder adquisitivo» por el buen comportamiento del empleo. Aunque los salarios «todavía no han recuperado de media el poder adquisitivo prepandemia, sí existen otras rentas como las pensiones que han crecido de una manera apreciable, así como los rendimientos de los ahorros e inversiones». No obstante, estos incrementos de renta no son homogéneos para toda la población. La gente de mayor edad y renta son los que arrojan incrementos superiores, y por lo tanto los que mayor capacidad de ahorro y gasto registran, según un informe de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF). En cambio, el ahorro de las personas de entre 16-29 y 30-49 años arroja un descenso del 1,4% y del 0,4%, respectivamente, al enfrentar los datos del segundo trimestre de este año frente al cierre de 2019. Conviene tener en cuenta también si el ahorro embalsado tras los años de la pandemia se ha agotado o no. En palabras de Markaide, la respuesta es clara. «No. Como ya hemos comentado el ahorro está creciendo en manos de las familias de más edad y más renta, aunque también son las que tienen menos propensión al consumo. Mientras tanto, las familias más jóvenes tienen una mayor tendencia al gasto fijo por razones vitales (alquiler, cuota hipotecaria, hijos...). Podemos concluir entonces que no es fácil que ese ahorro pase a ser consumo de una manera rápida».
KAS, el gran éxito empresarial de la familia Knörr, se reinventa medio siglo después para convertirse en la primera planta de refrescos sostenible del mundo (El Mundo, Deia)
Román Knörr Borrás (Sueca, 1939) ha regresado a la planta de KAS que hace 50 años se convirtió en la mejor embotelladora del mundo. "La diseñamos, construimos, montamos y comenzó a producir en 9 meses", ha recordado hoy el brillante empresario vasco en Etxebarri-Viña. KAS necesitaba duplicar su producción porque sus refrescos de limón y naranja y el éxito de su Bitter KAS le habían convertido en una de las cinco mejores marcas de consumo en España. Medio siglo después, y bajo la tutela de Pepsico, la planta de Vitoria se convertirá en la primera en emisiones cero del mundo. Pepsico ha celebrado en su planta embotelladora el medio siglo de un sueño empresarial que la familia Knörr hizo realidad en la década de los 70. La tercera generación de los descendientes de Roman Knörr Streiff, el cervecero alemán que se instaló en Vitoria en 1870. Justo un siglo después, KAS -fusión del apellido Knörr con gaseosa El AS también de la familia- despegó como el refresco de una sociedad española urbana -la generación del 'baby boomer' nacida entre 1950 y 1965- que cerraba el largo y negro periodo de la dictadura para caminar hacia la Transición Democrática. "Tuvimos que construir a todo meter la planta de Etxabarri porque ya en la de Gamarra no dábamos a basto", reconoce Knörr acompañado por la dirección de Pepsico, en España, los directivos alaveses y los casi 200 empleados. KAS se colocó a la vanguardia del consumo de refrescos con apuestas valientes que hoy replica con éxito Red Bull; el líder mundial de la experiencia de consumir un refresco.
La crisis de la vivienda ahoga a las clases medias (El País)
El acceso a la vivienda se ha convertido en un desafío crítico a nivel mundial. Ciudades antes asequibles se han encarecido hasta rozar niveles insostenibles. Las soluciones propuestas, como construir más casas, topar el alquiler, fomentar la vivienda social o limitar la adquisición de propiedades a extranjeros, no han resuelto esta plaga que se extiende por el globo. Entre 2015 y 2024, los precios han aumentado un 54% en EE UU, un 32% en China y casi un 15% en la UE (un 26% en España), según la OCDE. El encarecimiento en las grandes capitales es mayor; algunas han visto cómo el precio de la vivienda se ha duplicado en este periodo. Casi un 9% de la población de los países más industrializados del mundo dedica más del 40% de sus ingresos a pagar la hipoteca o el alquiler. ¿Cuándo comenzó? ¿Cuáles son las causas? No hay una respuesta única. Puede trazarse el origen en las políticas de finales del siglo XX, cuando muchos gobiernos occidentales redujeron la construcción de viviendas públicas con precios asequibles. La llegada de Ronald Reagan y Margaret Thatcher marcó un giro hacia el liberalismo en Occidente. Las viviendas sociales construidas unos años antes, en lugar de recibir mantenimiento, cayeron en decadencia y fueron demolidas sin reemplazo. Poco después, muchas ciudades se encontraron con menos recursos y una creciente demanda que no podían satisfacer. Marc Roark, profesor de Derecho en la Universidad de Tulsa (Estados Unidos), considera que estas políticas de austeridad jugaron “un papel importante en el deterioro de estas construcciones hasta suponer un peligro para las familias y en el aislamiento de las comunidades empobrecidas en áreas con pocas oportunidades económicas”.
España salva los muebles tras remitir los tipos (Diario Vasco)
Cuando el Banco Central Europeo (BCE) abogó por dar un giro de timón hace dos años subiendo los tipos de interés del 0% al 0,5% de una tacada saltaron todas las alarmas. Porque la memoria es frágil, pero los problemas que dejó la gran recesión de hace una década seguían en la retina de todos los españoles: impagos, sobreendeudamiento, desahucios, crisis... El Gobierno instó a la banca a remodelar su programa de ayudas a las familias con hipoteca; la oposición pedía medidas de apoyo; y los hogares y empresas se preparaban para lo peor, una subida sustancial de las cuotas para quienes ya tuvieran créditos contratados y mucha más restricción para los que quisieran pedir un crédito. Aun con todos los problemas que han afectado a una parte de la población en estos dos años, la economía ha salvado los muebles. Las peticiones para acogerse al nuevo Código de Buenas Prácticas Bancarias para facilitar el pago de las hipotecas apenas han superado las 60.000 del más de millón de casos que se preveían en un principio; los procesos de ejecución hipotecaria superaron los 9.000 el año pasado, un 20% menos que el anterior; y la morosidad se mantiene en el entorno del 3%. El huracán de tipos, que ya comienza a remitir después de que el BCE haya vuelto a bajar los intereses hasta el 4% esta semana (3,5%, según la nueva referencia oficial), ha hecho mella, pero no ha sucumbido a las economías domésticas. «Las familias han sabido reajustar sus presupuestos familiares», sostiene Santiago Carbó, catedrático de Análisis Económico de la Universidad de Valencia y director de estudios financieros de Funcas.
La banca comienza a desplegar los avales del ICO para vivienda joven (Diario Vasco)
Ha transcurrido casi un año y medio desde que el Gobierno anunciara la puesta en marcha de avales públicos para que los jóvenes sin ahorros suficientes pudieran acceder a una vivienda pidiendo hasta el 100% del valor de un inmueble. Este viernes, CaixaBank era la entidad que anunciaba el primer expediente aprobado a una joven canaria. Pero el sistema aún no se ha desplegado por completo y miles de ciudadanos esperan la posibilidad de valorar esta medida para intentar acceder a una vivienda en propiedad, con permiso del banco. Los avales del Instituto de Crédito Oficial (ICO), anunciados por el presidente Pedro Sánchez en mayo de 2023, pero aprobados formalmente por el Ejecutivo en febrero de 2024, consisten en una línea de 2.500 millones de euros para la compra de la primera vivienda a jóvenes menores de 35 años y a familias con menores a su cargo. Una medida «sirve para ofrecer una solución a un problema complejo que necesita de instrumentos concretos para abordarlo, ya que no tiene una única solución», según Moncloa. La mayor parte de las entidades financieras que se han adherido al programa (62 en la actualidad) siguen desarrollando los sistemas tecnológicos para poner en marcha esta ayuda. «Es un paso complejo porque a la hora de valorar la petición de un crédito hipotecario entra un agente nuevo, el ICO, al que hay que informar sobre la posibilidad de que ese potencial cliente necesite su aval», explican fuentes del sector bancario. «Para aprobar este tipo de operaciones, que ya de por sí son complejas, necesitaremos el aval público e incluirlo en la ecuación de esta operación siempre va a llevar más tiempo para la entidad», apuntan en el sector.
“Gobernar no es resistir. Gobernar es transformar” (El País)
Entrevista con la vicepresidenta y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. La líder de Sumar lamenta que hay medidas en el acuerdo con el PSOE que no se están ejecutando. " Gobernar es darle poder a quien no lo tiene hoy. Cuando esta semana aprobamos una norma pionera en nuestro país, y referencia ahora mismo ya en la OIT [Organización Internacional del Trabajo] y en el mundo, para dar derechos a las más invisibles, que son las trabajadoras del hogar, ¿qué estoy haciendo? Dando poder a las más invisibles y a las más débiles...En política de vivienda hay que hacer lo mismo que hemos hecho con la reforma laboral. Un diálogo, un acuerdo de país con todas las comunidades autónomas y con la FEMP [Federación Española de Municipios y Provincias]...Poner el énfasis en la devolución de las personas migrantes o poner el énfasis en las políticas securitarias... es el espacio de la derecha. Nosotros, en el mandato anterior, el Ministerio de Inclusión hizo un contrato en origen que salió mal y acabó, como sabe, con un fraude masivo y con una mafia. Y, entonces, la experiencia no ha sido positiva, soy franca. Creo en la regularización y en la formación en los países de origen...La reducción de la jornada es la medida que más valoran, según todos los institutos demoscópicos, los españoles y las españolas, hasta los que votan a Vox. Me consta que la patronal está dividida. No es lo mismo las grandes empresas, que ya tienen instauradas las 38,2 horas de media, que, lógicamente, las pequeñas empresas. Por eso tenemos un plan de acompañamiento a las pequeñas empresas para ayudarlas en esa reducción, que, además — estos días en el informe Draghi se veía o en el informe de la OCDE— es clave para aumentar la productividad. No hay discusión política sobre esto. A mí, que me gustaría el acuerdo, creo que el acuerdo es posible. Si no lo es, vamos a legislar y vamos a hacer un acuerdo con los sindicatos. El debate que tenemos ahora es si solo es la reducción de la jornada para los empleados y empleadas públicas, para un colectivo de trabajadores y trabajadoras de la banca, de las consultorías de un montón de sectores, o también lo es para las personas que trabajan en el comercio. ¿No tienen derecho estas personas? En la hostelería, ¿no tienen derecho? Yo creo que sí..."
Las caras del nuevo modelo laboral. Así ha cambiado en la última década (El País)
En la última década el mundo del trabajo ha dado un vuelco a golpe de crisis y digitalización. Hay muchos más afiliados y disfrutan de mayor flexibilidad, pero tienen más estrés que nunca. La demografía ha cambiado significativamente en la última década. Los españoles ocupados son 4,3 millones más que en 2014. En gran parte por el enorme estirón que han dado las mujeres: dos millones más, y por el empuje de la inmigración: 1,3 millones más. Ambos colectivos han diversificado la mano de obra, en palabras de Raymond Torres, director de Coyuntura de Funcas. Sin embargo, tengan la edad que tengan, los trabajadores se han visto obligados a adaptarse a las nuevas herramientas tecnológicas que a más de uno han llevado por la calle de la amargura. Es la transformación más profunda que se ha producido en el día a día del trabajo en una economía en la que el peso de los servicios se ha disparado. Cuando se empezaban a acostumbrar a utilizar las redes sociales, llegó la pandemia y todas las herramientas de comunicación a distancia. No contentos con ello, se extendió el big data, la automatización y el uso de robots, y ahora la inteligencia artificial (IA) amenaza con incorporarse a todos los ámbitos de la vida. “La tecnología ha cambiado mucho la forma en que trabajamos. Aunque depende de los sectores, la IA está en todas partes, pero todavía no tiene un alto impacto en el PIB y va a requerir rediseñar los puestos de trabajo”, sostiene Miguel Ángel Malo, profesor de Economía de la Universidad de Salamanca.
La píldora del BCE y la anemia europea (por Raymond Torres, El País)
"El recorte de tipos de interés administrado por el BCE —el segundo en lo que va de año—, unido a la expectativa de nuevos ajustes en los próximos meses, ha despertado un cierto optimismo acerca de la recuperación de las economías europeas más rezagadas o, en el caso de España, el mantenimiento del ciclo expansivo. El Banco Central anticipa un repunte progresivo del crecimiento hasta alcanzar, a partir de 2026, cotas cercanas al potencial europeo: un pronóstico que, sin embargo, no aleja el riesgo de descuelgue del Viejo Continente, delatando las limitaciones inherentes a los instrumentos convencionales de política económica en el actual contexto de cambio estructural. La propia presidenta, Christine Lagarde, alude a algunos factores que podrían constreñir el giro monetario tanto en lo inmediato, por la persistencia de la inflación en el sector de servicios, como en el largo plazo, habida cuenta de las tensiones proteccionistas y de la presión que estas ejercen sobre los costes importados. Concretamente, es probable que el tipo de referencia del BCE no baje del entorno del 2,5%, un punto menos que en la actualidad, de modo que el estímulo será limitado. Sobre todo teniendo en cuenta los efectos contractivos de las medidas de drenaje de liquidez, también diseñadas por Fráncfort, con impactos relevantes para la financiación de los Estados. Así pues, a partir de enero el Banco Central se deshará de todos los bonos públicos que llegan a vencimiento. Las condiciones de financiación de la deuda pasarán por tanto a depender de la valoración de los mercados y de su percepción del grado de sostenibilidad de las finanzas públicas. En todo caso, el recorte del precio del dinero es demasiado tímido para doblegar las inercias que lastran la economía europea..."
La UE afronta el desafío de evitar una lenta agonía (El País)
Mario Draghi ha mostrado a Europa cómo sería el abismo. O la UE emprende una revisión radical de su política industrial para revertir el declive competitivo frente a Estados Unidos y China, e invierte de manera conjunta para ello, o el club comunitario se enfrenta a una “lenta agonía”. El diagnóstico del ex primer ministro italiano en un denso informe para la Comisión Europea está claro: si no se actúa, la UE puede caer en la irrelevancia internacional. El expresidente del Banco Central Europeo, el hombre a quien se atribuye haber salvado el euro en la crisis de la deuda en 2012, apunta que para evitar esa debacle gradual hacen falta fórmulas ambiciosas, como la emisión de deuda conjunta, invertir mucho más y repensar las reglas de competencia y flexibilizarlas para que las empresas europeas ganen tamaño y no enfrenten obstáculos que lastran su innovación. “Europa no puede permitirse más aplazamientos para preservar el consenso”, zanja. El informe Draghi, hecho público esta semana, que propone un impulso inédito a la inversión productiva de casi 800.000 millones de euros anuales (el cuádruple de la envergadura del plan Marshall), ha encendido el debate sobre cómo conseguir esos fondos y ya ha levantado las suspicacias y el rechazo de algunos de los Estados más frugales, como Alemania, que se ha mostrado contrario a subir el gasto o emitir deuda común. Además, las recetas llegan en un momento en el que Berlín y París tienen problemas políticos internos que están lastrando el motor franco-alemán que durante años ha espoleado el bloque, en un club comunitario que está viendo, además, el aumento de la ultraderecha y en un continente en guerra, la de Rusia contra Ucrania, que va camino de cumplir tres años. El mensaje de Draghi es claro: no solo está en juego la economía europea, su industria, también el modelo de vida del bloque de 450 millones de habitantes. “Hemos llegado al punto en que, si no hacemos nada, tendremos que comprometer nuestro bienestar, nuestro medio ambiente o nuestra libertad”, ha dicho el italiano.
La competitividad europea echa en falta innovación (El País)
Mario Draghi ha elevado el concepto teórico de la productividad a un valor esencial del proyecto de la UE. “Si Europa no puede ser más productiva, nos veremos obligados a elegir […]. No podremos financiar nuestro modelo social. Necesitaremos reducir algunas, si no todas, nuestras ambiciones. Es un desafío existencial”, señala en el prólogo su informe El futuro de la competitividad europea. La situación de partida es compleja, porque los Veintisiete van por detrás de EE UU y China y la desaceleración del crecimiento de la productividad he permitido en el caso norteamericano que la renta disponible por habitante haya crecido el doble que la europea desde 2000. El informe de Draghi destaca que el diferencial de esa productividad entre Europa y Estados Unidos se explica básicamente por el liderazgo norteamericano del sector tecnológico, ante la debilidad que muestra en ese campo Europa. Oriol Aspachs, director de CaixaBank Research, rechaza que esa dispar evolución entre ambas regiones sea general, sino que se explica por algunos territorios. “La diferencia se encuentra en que en las zonas más productivas de EE UU —California, Nueva York y Massachusetts— la productividad ha crecido un 2%, mientras en las regiones punteras de Europa, en Alemania, ese aumento es del 0,7%”. El resto, dice, crecen al mismo ritmo, pero en esos cuatro estados norteamericanos tienen las empresas punteras de los sectores punteros. La cuestión es que apenas cuatro compañías del Viejo Continente entran en la clasificación de las 50 mayores tecnológicas. Y esas compañías son jóvenes, no como en Europa, donde el sector con mayor inversión en innovación es el automovilístico. Lo mismo que pasaba hace 20 años en Estados Unidos (con un importante peso de los sectores farmacéutico y químico), pero una situación que ahora ha cambiado para dejar paso a las Apple y Google.
"En España todo cuesta la mitad" (El Mundo)
Durante su visita a la Universidad de Tongji en Shanghái (China) esta semana, Pedro Sánchez resaltó los beneficios de la política española para fomentar las empresas emergentes, y animó a los universitarios chinos a visitar y trabajar en España. Con este propósito de atraer talento internacional, recordó la aprobación hace dos años de la Ley de Fomento del Ecosistema de Empresas Emergentes, también conocida como Ley de Startups. Entre otras innovaciones, la norma abría la posibilidad de acelerar el proceso para conseguir permisos de trabajo para los extranjeros que quieran teletrabajar desde España, así como determinadas ventajas fiscales. Para ellos, se creó la Digital Nomad Visa. De acuerdo con la definición ofrecida en la ley, «los nómadas digitales son personas cuyos empleos les permiten trabajar en remoto y cambiar de residencia frecuentemente, compatibilizando el trabajo de alta cualificación con el turismo inmersivo en el país de residencia». Este tipo de permiso, emitido a raíz de la norma aprobada en diciembre de 2022, no cuenta aún con valoraciones o informes de resultados por parte de los organismos oficiales, con lo cual no es posible determinar aún su efecto. No obstante, la intencionalidad del permiso queda clara, dado que se dirige a un perfil de extranjero que debe demostrar titulaciones universitarias o de formación profesional «de reconocido prestigio», acreditaciones por parte de la empresa de que la actividad laboral a realizar es real y continuada y realizable a distancia, y que la existencia de esta relación laboral tiene una vida de al menos tres meses. Y puesto que siguen disponiendo del salario de su país de origen, generalmente este tipo de perfiles gozan de una capacidad adquisitiva alta.
Venezuela excluye a Repsol de represalias (El Mundo)
La vicepresidenta ejecutiva de Venezuela, Delcy Rodríguez, empieza ya a ejercer su nueva cartera de ministra del Petróleo y convocó por sorpresa a Repsol para escenificar que excluye el «oro negro» de cualquier represalia a España. Citó al director de la unidad de Negocios de Repsol en Venezuela, Luis Antonio García Sánchez, en Caracas, y, según un comunicado oficial, «avanza la cooperación en materia energética entre Venezuela y la empresa Repsol». Un portavoz oficial del grupo español declinó hacer comentarios sobre la reunión, que se produjo a iniciativa de Rodríguez. El tono cordial de la vicepresidenta con Repsol contrasta radicalmente con el teórico enfado del Gobierno venezolano con la titular de Defensa de España, Margarita Robles, por calificar su régimen de «dictadura». Es habitual, por otra parte, que los ejecutivos de empresas acudan a toda llamada del ministro del ramo sin que eso implique cambios. En Repsol se ciñen a este mensaje: «Repsol está presente en Venezuela desde 1993 y desde entonces mantiene un compromiso con los venezolanos y un respeto escrupuloso del marco normativo del país e internacional». Otras fuentes conocedoras del encuentro señalan a este diario que no se han producido novedades en la complicada situación de Repsol en Venezuela que, como publicó este diario el pasado viernes, arrastra una fuerte deuda y está cobrando una parte en especie con el aumento de exportaciones de petróleo venezolano a España y otros países occidentales que está permitiendo Estados Unidos. España ha multiplicado por cuatro sus importaciones de petróleo a Venezuela tras la invasión de Ucrania al flexibilizar sanciones Washington con el objetivo de encontrar alternativas a la energía de Rusia.
El gigante alemán Volkswagen muestra sus pies de barro (El Correo)
El gigante automovilístico alemán se tambalea. La suspensión esta semana por la dirección del consorcio Volkswagen de todos los convenios colectivos, a lo que se ha sumado el anuncio de que adelanta un mes las negociaciones con el poderoso sindicato gremial IG Metall sobre las nuevas condiciones laborales, confirma que el mayor productor europeo de automóviles afronta una grave crisis. El grupo VW cuenta con más de 680.000 empleados en todos el mundo y marcas como Audi, Porsche, SEAT, Skoda, Bentley y Lamborghini. Para los casi 300.000 miembros de la plantilla en sus nueve sedes en Alemania la noticia ha resultado toda una conmoción. Por primera vez en 30 años la dirección de Volkswagen ha barrido de la mesa la garantía del puesto de trabajo. Si el sindicato y el fabricante de automóviles no llegan a un acuerdo sobre un nuevo programa de garantías laborales, VW podría despedir a sus empleados en Alemania por motivos operativos a partir de julio de 2025. «Tenemos que llevar a Volkswagen a una situación en la que bajemos los costes en Alemania hasta un nivel competitivo para poder con propia fuerza invertir en nuevas tecnologías y nuevos productos», declaró el director de trabajo y jefe de personal del consorcio, Gunnar Kilian. El fabricante de modelos legendarios como el ‘escarabajo’ o el Golf registra desde hace años unos cada vez más bajos márgenes de beneficios y quiere elevarlos ahorrando en los costes de personal. La empresa apunta también, entre otras cosas, al drástico recorte de las bonificaciones de sus directivos, pero también a la reducción de la cifra de sus aprendices, actualmente de 1.400, y a la suspensión de la garantía de contratación con la que contaban hasta ahora.
El declive económico y político empuja a Alemania a un escenario inédito en décadas (Diario Vasco)
Alemania ya no es la que era. Ni locomotora de Europa, ni ejemplo de éxito, ni peso pesado en una escena internacional donde el eje francogermano –y especialmente sus respectivos líderes, Emmanuel Macron y Olaf Scholz– se encuentra en horas bajas. «Una cosa está clara: nuestra reputación nunca ha sido tan mala», resumía en abril Theodor Weimer, director general de Deutsche Börse, el grupo que gestiona el mercado bursátil germano, durante un encuentro con los empresarios bávaros donde tachó al país de «chatarrería». La misma nación que tiró durante años de la Eurozona impulsada por las exportaciones y una potente industria hasta que la enorme dependencia de China, su segundo socio comercial tras EE UU, y del gas ruso se convirtió en una pesadilla. Uno de los puntos de inflexión se produjo con la invasión de Ucrania y la decisión del presidente ruso, Vladímir Putin, de cerrar el grifo del gas como respuesta a la sucesión de sanciones de Occidente. La industria alemana, con una alta concentración de compañías que requieren un uso intensivo de energía, como las químicas o las automovilísticas, dejó de ser competitiva. En el caso del sector de las cuatro ruedas, además, los chinos habían comenzado a comerle terreno con sus modelos ‘low cost’. El antiguo motor de Europa es desde 2018 el miembro del G7 con menor crecimiento y este año se espera que la evolución de su PIB sea de un modesto 0,4%. El propio ministro de Economía, Robert Habeck (Los Verdes), observa una situación «dramáticamente mala».
Grecia está harta del turismo (El País)
El país bate récords de ocupación mientras cada vez más voces se preguntan en alto si merece la pena mantener un modelo que aporta más problemas que beneficios a los ciudadanos. Cada año más de 33 millones de visitantes llegan a Grecia (11 millones de habitantes). En agosto las tiendas de la capital ya no cierran para atender la demanda de los turistas. Atenas ha pasado de ser una parada de uno o dos días para ver la Acrópolis y otros centros antes de dirigirse a las islas, a convertirse en un destino en sí misma. Ya no se puede visitar la Acrópolis sin reservar la entrada con uno o dos días de antelación porque cada día se alcanza la ocupación máxima en el yacimiento arqueológico. Las autoridades han establecido un límite de 23.000 visitantes por jornada, 3.000 más que el año pasado. Y la mayoría de las islas han prohibido el campin libre e imponen multas a quien plante una tienda de campaña en una playa. El primer ministro Kyriakos Mitsotakis anunció que, a partir de 2025, el Estado cobrará una tasa de 20 euros a cada turista que desembarque de un crucero en Santorini o Mykonos. La tasa solo estará vigente durante el verano, en temporada alta.