20230416

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Domingo 16 de abril de 2023
Núm 1373/2023
Año XXXVI

La industria vasca reduce un 50% su peso en el PIB desde 1955, pero sigue siendo el " gran motor" (Diario Vasco)

La industria vasca ha reducido a la mitad su peso en el PIB de Euskadi desde 1955 pero sigue siendo un «gran motor» de la economía vasca. La última actualización del Reg-Data, una profusa base de datos realizada por Fedea y BBVA Research que recoge los principales agregados económicos de las autonomías en las últimas seis décadas, revela que el peso relativo de la industria manufacturera vasca sobre el conjunto de la economía de Euskadi ha pasado del 44,6% de mediados de los cincuenta a un 22,3% en 2021. En ese periodo, otros sectores han ganado protagonismo, como los servicios, que han pasado de suponer un 31% a representar un 50% del total del PIB vasco, según la misma base de datos. «La industria manufacturera sigue siendo uno de los grandes motores de la economía vasca, eso es absolutamente indiscutible, pese a haber perdido peso relativo en las últimas décadas», confirma el profesor Pep Ruiz, economista principal y responsable de análisis regional de BBVA Research. Ese descenso industrial puede parecer abismal e incluso despertar alguna alarma. Sin embargo, el experto del servicio de estudios del banco azul descarta por completo esa idea y subraya que la moderación «es algo que ha sucedido en todas las economías industrializadas de nuestro alrededor y no es preocupante». «Hablamos de algo generalizado en sociedades industriales, y España, Euskadi o Cataluña no son ninguna excepción. De hecho no es nada necesariamente malo ni preocupante», señala también Ángel de la Fuente, de Fedea, que coincide con Pep Ruiz en que el cambio de panorama y de peso relativo de la industria se debe a una batería de factores, muchos de ellos exógenos a la esencia del propio sector manufacturero.

El auge del turismo tras el final de ETA y el avance del sector del ocio (Diario Vasco)

BBVA Research añade algunos otros factores que han contribuido a menguar el peso relativo de la industria manufacturera vasca. El más evidente es el repunte del turismo como uno de los nuevos motores económicos en no pocas regiones de España en las últimas décadas. Algo que ha tenido una influencia muy elevada en Cataluña (la eterna ‘rival’ industrial de Euskadi en el mapa español), cuya manufactura ha pasado de representar un 43,3% de todo el Valor Añadido Bruto (VAB) catalán en 1955 a apenas un 17,1% en 2021, mientras Cataluña se consolidaba como referencia turística. El terrorismo de ETA impidió en su día el despegue del turismo en Euskadi; un fenómeno que, sin embargo, sí se viene apreciando de forma casi exponencial en toda la comunidad autónoma y con notable aportación al PIB en lugares como Gipuzkoa desde que desapareció la violencia. De hecho, el turismo supone ya entre un 7% y un 9% del PIB del territorio. Pep Ruiz descubre algunos otros catalizadores de esa alteración del protagonismo entre los grandes responsables de la economía vasca. Así, resalta que desde finales de los setenta, con la democracia, el auge del Estado de Bienestar ha traído consigo un mayor peso de los llamados servicios públicos o sociales y de sectores como la Educación o la Sanidad, lo que ha hecho también que los pesos relativos cambien en detrimento de aquel protagonismo de la industria manufacturera. «Los servicios públicos han duplicado su peso en Euskadi desde el año 1976 y en el conjunto de España han crecido en cinco puntos», revela.

Avalancha de oposiciones a funcionario para cubrir la oleada de jubilaciones (El Correo)

Ya hay más de 54.000 plazas convocadas en toda España y el empleo público está en máximos, aunque el 20% de la plantilla supera los 60 años. La seguridad y certidumbre de un empleo público seduce a seis de cada diez personas de entre 18 y 55 años, que prefieren convertirse en funcionarios a tener un contrato fijo en una empresa o levantar su propio negocio, según una encuesta publicada por Opositatest, una plataforma de preparación de opositores. Este deseo podrá hacerse realidad este año para decenas de miles de personas ante la histórica avalancha de oposiciones de los próximos meses por todo el territorio nacional. Sin embargo, y al contrario de lo que pueda pensarse, no implicará un exceso de empleados públicos, sino que servirá para paliar los años de atasco en el acceso a un puesto en la Administración y empezar a hacer frente a la oleada de jubilaciones. Se podrá optar a plazas para todo tipo de perfiles. Sanitarios, ingenieros, arquitectos, diplomáticos, científicos, investigadores, bibliotecarios, inspectores de Hacienda y de Trabajo, profesores, veterinarios, administrativos (donde se aglutinan la mayoría de vacantes), informáticos, interventores, letrados, auditores, contables, subalternos... Incluso astrónomos, meteorólogos, farmacéuticos, oficiales de la Armada o traductores tienen puestos en el funcionario del Estado que se ha convocado oficialmente y podrá materializarse próximamente. El abanico de opciones parece infinito y muchas veces desconocido. En estos momentos hay más de 21.000 puestos para nuevos funcionarios del Estado convocados y pendientes de realizar las pruebas para plazas que corresponden a ofertas de empleo de los años 2020, 2021 y 2022, según un listado elaborado por el departamento dirigido por la ministra María Jesús Montero. 

Euskadi no quiere trabajar los domingos (El Correo)

El año pasado Euskadi fue la comunidad autónoma que más respetó su libranza. Únicamente el 16,5% de su población ocupada tuvo que trabajar el último día de la semana, lo que le llevó a liderar un podio que tiene en sus puestos altos a Navarra (el 16,7%), Murcia (el 17%) y La Rioja (17,2%). La gran mayoría de los vascos llamados a fichar el domingo tuvieron que hacerlo dos o más veces al mes. Tan solo 37.900 acudieron un único domingo de manera mensual, según recoge la Encuesta de Población Activa (EPA) que elabora el Instituto Nacional de Estadística (INE). En toda España la media de trabajadores que ejercieron su labor ese día ronda el 21,3% de todos los ocupados, lo que en cifras absolutas supone más de 4,33 millones de trabajadores. Este balance refleja un incremento durante los últimos años, pese a la marcada caída en pandemia y a los estragos dejados por ella en la realidad laboral. También en 2013 se vivió un descenso puntual en un momento todavía definido por la crisis económica, si bien la escalada se ha mantenido casi constante desde hace tres lustros. La hostelería, la sanidad, el transporte y la seguridad son los sectores más habituales del trabajo en domingo, pero no son los únicos. En los últimos años desde el personal de los gimnasios al del reparto de paquetes se han vuelto también habituales. En Euskadi, el fuerte peso que todavía mantiene la industria, acostumbrada a descansar mayoritariamente los fines de semana, y las movilizaciones sindicales para frenar la apertura del comercio en domingos y días festivos, permiten mantener la posición actual. Por contra, el cada vez mayor peso del turismo ha disparado las contrataciones en el sector hostelero, que ayuda a engordar la cifra de los empleados en fin de semana, acrecentando al mismo tiempo los problemas de conciliación familiar.

En Euskadi no hay quien coja el testigo (Diario Vasco)

Asociaciones y actividades de todo tipo están desapareciendo por la falta de interés de los jóvenes vascos en relevar a sus mayores. Su escala de valores es otra. Son individualistas, más europeos. En el conjunto de Euskadi, las asociaciones de todo tipo se encuentran en retroceso. Sus integrantes envejecen mientras constatan apesadumbrados la existencia de una falta de relevo generacional que amenaza con hacer desaparecer los frutos de sus esfuerzos. Ven que todo el trabajo que han realizado durante años, robando horas al día y sacrificando su tiempo libre, no tiene continuidad. Y eso duele. Un informe elaborado por el Instituto de Estudios de la Universidad de Deusto constató en 2008 que la falta de relevo y el cambio de hábitos sociales estaba provocando un fuerte retroceso de las asociaciones culturales. Quince años después, este problema se mantiene. «Ha habido un cambio en la escala de valores», sostiene el catedrático de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanas en la Universidad de Deusto y coordinador de aquel estudio, Roberto San Salvador. Encontrar jóvenes dispuestos a participar en actividades que antes eran multitudinarias es una complicada tarea que desanima a sus cada vez más envejecidos promotores. Para San Salvador existen varios motivos que explican esta desafección. Por un lado, está «la obsolescencia natural de actividades que con el tiempo van perdiendo su sentido». Es lo que sucede con la presencia del hecho religioso en la vida pública. Un segundo motivo es «el cambio de hábitos, prácticas y consumos». «Hay aspectos de la vida que hace que algunas actividades vayan perdiendo presencia», asegura San Salvador, que destaca una tercera razón «mucho más profunda» a la que califica de «cambio en la escala de valores que tiene mucho que ver con la búsqueda de referentes». Ya no se lleva lo del «hacer por hacer», sostiene. Es una idea que choca con la concepción algo bucólica de un País Vasco con el asociacionismo, el auzolan, como una de sus señas de identidad. «En nuestro tejido social estaba implantada una mayor gratuidad, mucha gente participaba en coros, comisiones de fiestas o asociaciones simplemente por el hecho de aportar algo a los demás», explica. Pero esto ya no sucede. 

Vostok quiere dar el salto a la fabricación local (El Correo)

La empresa de motos eléctricas, ubicada en Sondika, proyecta el lanzamiento de un nuevo modelo ‘made in Euskadi’. Hasta ahora han confiado buena parte del proceso de producción a fabricantes chinos, pero ya planean una producción ‘made in Euskadi’ para el lanzamiento de un nuevo modelo que en la actualidad está en fase de diseño. «Hay que ser coherentes. Si nuestra empresa tiene vocación de defensa de la sostenibilidad, fabricar en China y transportar hasta aquí también genera muchas emisiones», aseguran Rachel Lesslar y Maiara Marths, las dos accionistas de una empresa que, aseguran, «no queremos convertir en un ‘unicornio’. Somos industria y sabemos que más bien tenemos un elefante entre manos». Rachel nació en 1989 en Malasia –es hija de padre malayo y madre irlandesa– y vivió en el país asiático hasta los 12 años. Diplomada en Administración de empresas, recaló en el País Vasco en 2012 para trabajar en una compañía con múltiples intereses en China. En su país, y viendo cada día el espectáculo del puente que une su ciudad natal, Johor-Bahru, con Singapur –más de 100.000 motocicletas lo atraviesan cada jornada en medio de una nube de espesa contaminación–, comenzó a tomar conciencia de que «algo había que hacer». Años más tarde encontraría respuesta a su inquietud cuando comenzó a fraguar la idea de crear una empresa fabricante de motocicletas eléctricas, con la idea centrada en la movilidad urbana. Maiara, nacida en Brasil en 1993, licenciada en Derecho, Comunicación y Marketing, también dio con sus huesos en el País Vasco, en este caso en San Sebastián, de forma casi accidental. Sus padres tenían unos amigos en la capital donostiarra y ella decidió venir a estudiar a Euskadi y a poner en práctica su temprana vocación de empresaria y emprendedora. Conoció a su socia Rachell, precisamente, en un evento de ‘startups’, cuando Maiara promocionaba una curiosa empresa que había puesto en marcha: se dedicaba a llevar a guipuzcoanos hasta Granada para que obtuvieran allí su carnet de conducir, porque era mucho más barato. La sociedad mercantil se constituyó en 2016 y desde entonces recorren eso que en el argot de la creación de empresas se conoce como ‘el valle de la muerte’. Estos años han visto nacer un primer prototipo que no pasó de ahí; el inicio de la fabricación de un primer modelo –equivalente a una motocicleta de 49 centímetros cúbicos–; la llegada de la pandemia y la práctica paralización de la actividad durante algunos meses; una cierta euforia en las ventas tras la superación del covid «porque la gente comenzó a priorizar el transporte individual al colectivo»; y ahora el lanzamiento de un segundo modelo de motocicleta –equiparable a 125 centímetros cúbicos– y el diseño de un tercero que es el que se fabricará ya íntegramente en el País Vasco. En ese periodo también ha lanzado al mercado un patinete eléctrico, que asimismo es ‘made in Euskadi’ en su totalidad y que ensamblan en un pabellón industrial ubicado en Vitoria.

El motor se da un baño de beneficios en plena tormenta (El País)

Las fábricas todavía funcionan a medio gas por la crisis de suministros acaecida con la pandemia del coronavirus y no dan abasto a las peticiones de los compradores; las listas de espera para recibir un coche nuevo han estado en máximos históricos y en esa situación no solo no hacen falta las promociones, sino que los fabricantes están en condición de subir precios porque hay gente dispuesta incluso a buscar una alternativa en el mercado de segunda mano. Y amén que las compañías han vendido más caro en los últimos tres años. Solo en 2022, según datos de Eurostat, los vehículos nuevos en la zona euro subieron un 10% de promedio, porcentaje que en parte se explica también por el alza de las materias primas y la energía. Desde 2020 ese repunte alcanza el 18%. La industria del motor ha vivido la época más convulsa que se recuerda desde la Gran Recesión y, a la vez, ha cosechado unos beneficios récord pese a haber reducido el número de unidades vendidas. Su beneficio de explotación (y el neto) es el mayor de la historia. Los 16 principales grupos de la industria sumaron 156.694 millones de euros en 2022, una cifra que supone casi duplicar los resultados previos a la pandemia, según un análisis de la filial alemana de EY. El consorcio alemán Volkswagen lideró la clasificación con 22.124 millones y le siguieron Stellantis y Mercedes-Benz, también por encima de los 20.000 millones. El sector ha navegado bajo la tempestad del coronavirus (una crisis de oferta) y, pese a los latigazos que dejaron sus centros de producción en una situación que tendría que ser normal en periodos recesivos, ha salido más que airoso con márgenes operativos que duplican los tradicionales del sector y que le han permitido hacer caja. 

El ‘ladrillo’ se impone como refugio del ahorro (El Mundo)

La vivienda es desde hace décadas la principal forma de acumulación de riqueza en el país y ahora, ante una situación económica mundial con la incertidumbre como protagonista, esa preferencia se refuerza. Siete de cada 10 españoles asegura estar interesado por una inversión en alquiler, un 72% para ser exactos, según el I Observatorio Inmobiliario elaborado por Masteos, empresa de origen francés especializada en inversión en alquiler llave en mano. España es el país donde más interés despierta este tipo de activo en comparación con el resto de países analizados por la encuesta, que se realizó con 8.159 personas de ocho estados europeos diferentes. Según los datos recogidos por el estudio, el inmobiliario se impone como inversión preferida de los españoles por delante de otras opciones como las cuentas de ahorro personales con ventajas fiscales, las acciones en Bolsa o las criptomonedas. «La vivienda es la principal fuente de ahorro de los españoles», explica Beatriz Toribio, directora general de Masteos en España. De acuerdo con los datos que maneja la compañía, la rentabilidad media del alquiler en el país fue del 7,7% a cierre de 2022, frente al 5,2% que ofrecía hace 10 años. «Madrid y Valencia despiertan más interés que Barcelona», comenta Toribio. Sin embargo, las rentabilidades pueden llegar a ser superiores en municipios cercanos a las grandes ciudades y en lugares donde existe una fuerte demanda de arrendamiento de calidad.

Contratos públicos en la picota por la subida del IPC (El País)

El pasado 2 de marzo finalizó la aplicación del mecanismo de revisión excepcional de precios de los contratos públicos que el Gobierno estableció por decreto para hacer frente a la fuerte subida de los costes de muchos materiales de obra. Sin embargo, tras el parche, y ante el persistente encarecimiento de las materias primas y la energía, los contratistas se están planteando demandar para no seguir perdiendo dinero. Los expertos auguran un aluvión de reclamaciones que tendrán que dirimirse en los tribunales. Y es que, en opinión de Javier Guillén, consultor de Herbert Smith Freehills, el citado instrumento ha sido “una solución parcial y, un tanto, fragmentaria”, puesto que sólo resultaba de aplicación para los contratos públicos de obras y no para los demás, como los de servicios o los de suministros. Por otro lado, solo tenía en cuenta el coste de determinados materiales y dejaba fuera el de la energía. Además, añade el experto, la cuantía de esta revisión excepcional no podía ser superior al 20% del precio de adjudicación del contrato. Por su parte, José Vicente Morote, socio director de Andersen, admite que esta medida ha supuesto un balón de oxígeno para un sector ya penalizado por la anterior crisis económica. Eso sí, tal y como apunta el abogado, su objetivo no era que la Administración asumiera en solitario y de forma permanente las consecuencias de la inflación. Por este motivo su aplicación ha sido temporal, algo que lamentan desde la Confederación Nacional de la Construcción (CNC). “Que no se haya prorrogado supondrá el cierre de más empresas, lo que en última instancia es una amenaza para la ejecución de los fondos europeos y la transformación económica del país”, advierte Pedro Fernández Alén, presidente de la CNC.

El traslado de Ferrovial destapa la inferioridad de las empresas españolas frente al exterior (El Correo)

La posibilidad de cotizar directamente en EE UU fue el último punto de fricción entre Ferrovial y el Gobierno a pocas horas de que tuviera lugar la junta de la empresa, el pasado jueves, cuando los accionistas avalaron su traslado de sede a Países Bajos de forma abrumadora. Durante su discurso oficial, el presidente de Ferrovial, Rafael del Pino, recordó que «no es fácil ni inmediato establecer una cotización directa en EE UU». Una posición que el Gobierno había negado. Esta discrepancia revela las necesidades corporativas de la empresa y la maquinaria administrativa que hace falta para que las grandes cotizadas españolas amplíen sus negocios. La cuestión de estar pisando el parqué de Wall Street sin necesidad de intermediarios es solo la punta del iceberg de esos ‘hándicap’. Las empresas con sede en España solo cotizan a través de los llamados American Depositary Receipt (ADR), pero eso no implica cotizar de forma directa en la Bolsa estadounidense. Varias grandes cotizadas, como Repsol, BBVA, Santander, Inditex o Grifols ya lo hacen. Se trata de un sistema por el que un banco americano adquiere un gran paquete de acciones de la empresa y emite unos certificados, equivalentes y respaldados por estas participaciones. Esta solución permite a inversores estadounidenses negociar valores de empresas extranjeras, las cuales se benefician atrayendo nuevos inversores. Además, los dividendos que reparten en origen también se entregan allí en dólares. Sin embargo, en la propia misiva que el Ministerio de Economía envió a Ferrovial días antes de la junta, el Gobierno admitía indirectamente las trabas que existen para poner en marcha una cotización directa a corto plazo.

La silenciosa y programada fuga de Ferrovial (El País)

El actual presidente del grupo, Rafael del Pino y Calvo Sotelo, el primogénito de la saga que fundó su padre, ha decidido que es tiempo de mudanza. La junta general de accionistas de Ferrovial aprobó el jueves 13 el traslado de la sede social y fiscal a Ámsterdam. Para ello, la matriz española Ferrovial SA será absorbida y fusionada por la filial neerlandesa, Ferrovial International SE (FISE). El fin último es cotizar en las Bolsas de Ámsterdam y Nueva York. Frente a viento y marea (sobre todo el que sopla desde el Gobierno, opuesto al traslado), Del Pino defiende que Wall Street dará más visibilidad que el Ibex 35 a la acción ante los inversores. Y justifica el salto en que la actividad internacional del grupo supone más del 80% de sus ingresos y el 36% se generan en Norteamérica. La internacionalización de Ferrovial es el principal argumento (o excusa para algunos críticos como la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz) para ese traslado. Sin embargo, esa salida al exterior no es repentina. Se ha fraguado desde hace más de tres décadas y se intensificó cuando Rafael del Pino Calvo-Sotelo sucedió a su padre en 2000, apenas unos meses después de la salida a Bolsa en 1999.

¡Ay Calviño! (por Marco-Gardoqui, El Correo)

"...Algunos ministros quieren fijar precios de venta, otros regular salarios, todos subir cotizaciones...Lo que no ha interiorizado bien, y el caso de Ferrovial es un buen ejemplo, es que las empresas deben cumplir las leyes, pero nadie puede impedir que acomoden sus actuaciones a sus conveniencias dentro de ellas. Ferrovial se va porque lo ha decidido así. ¿Debe algo? Que se lo cobren. ¿Es legal su decisión? Lo es, lo admite la norma española y lo protege la comunitaria. Pues entonces que se lo permitan. Eso es todo, o al menos, eso debería ser todo. El poder no puede reducir más el estrecho margen de maniobra que deja abierto a la sociedad civil. Bastantes restricciones nos han impuesto ya como para permitir sin protestar nuevas y mayores injerencias. La segunda intromisión es ese ‘artefacto’ que anuncia el Ministerio de Economía ¡Ay Calviño, cómo has cambiado! La creación de un observatorio de los márgenes empresariales. ¿A qué viene eso? ¿No dispone ya de la suficiente información de los balances y de las cuentas de resultados que reportan periódicamente las personas jurídicas? ¿Y qué piensa hacer después con esa nueva información? ¿Reducirlos por decreto? ¿ponerles topes por Ley? Algunos ministros quieren fijar precios de venta, otros regular salarios, todos subir cotizaciones. ¿Dónde termina esto? ¿Dónde está el final? Un día, hace ya años, dije que «si no lo arregla Nadia, no lo arregla nadie». Hoy habría que decir que «si no lo arregla Europa, no lo arregla Nadia». ¿Lo arreglará? No esté tan seguro…2

24 puntos que hacen temblar el comercio (El País)

Son los puntos neurálgicos del comercio mundial, las rutas estratégicas que permiten el flujo de mercancías y materias primas a lo largo y ancho del planeta. Los chokepoints (cuellos de botella), esos estrechos canales o pasos obligados por los que deben transitar los buques petroleros o barcos cargados de contenedores, son hoy más importantes que nunca en una economía cada vez más conectada, con mucho mayor intercambio de productos y con un número creciente de personas demandando alimentos. El mal funcionamiento de cualquiera de ellos, ya sea por conflictos o por cuestiones medioambientales, económicas o políticas, tendría graves ramificaciones para la seguridad del suministro de bienes global. Son apenas un puñado: unos 24 puntos, unos pocos kilómetros de longitud que conectan diferentes regiones económicas, explica Jean-Paul Rodrigue, profesor de la Universidad Hofstra (Nueva York, EE UU) y autor del libro Geografía del transporte. De este total destacan menos de una decena, que soportan los flujos del comercio marítimo y que dan servicio a los principales mercados del planeta. “Tenemos un mundo en el que más del 70% está cubierto por agua, pero existe una cantidad limitada de rutas que conecta dos océanos”, dice Rodrigue. Entre ellos sobresalen el estrecho de Malaca, que une el Pacífico con el Índico y por el que atraviesa un 30% del comercio mundial y ocho de cada diez de las importaciones de petróleo de Japón, Corea del Sur y Taiwán; y el de Ormuz, que conecta el golfo Pérsico con el golfo de Omán y el océano Índico, está administrado por Irán y por aquí pasan más de 20 millones de barriles de crudo al día, casi un cuarto de la producción global actual.

Riesgo financiero (por Raymond Torres, El País)

"Las fuerzas expansivas siguen prevaleciendo, desmintiendo los vaticinios más agoreros sobre la marcha de la economía española, pero las advertencias se acumulan acerca de la prueba de estrés a la que se está sometiendo el sistema financiero mundial. En sus proyecciones de primavera, el FMI identifica con una claridad inusual las principales vulnerabilidades del sistema, y sus probables derivadas en la economía real (en comparación, las llamadas de atención de los reguladores financieros europeos aparecen como ambiguas y difíciles de interpretar). El mensaje central es nítido: los anteriores episodios de subidas abruptas de tipos de interés han producido fuertes sacudidas financieras y en la economía, especialmente en contextos de deuda elevada como el actual. De ahí el recorte de las previsiones de crecimiento mundial para este año hasta el 2,9% —un nivel muy reducido para la economía mundial— y la revisión al alza del riesgo de recesión como consecuencia de la inestabilidad financiera. La advertencia contrasta con el momento relativamente dulce que vive la economía española. El descenso de los precios energéticos (-22% desde los máximos del verano) ha aportado un balón de oxígeno al bolsillo de los consumidores y a los sectores más electrointensivos. El contrashock de oferta se ha producido también en el resto de Europa, de modo que la eurozona ha evitado la recesión. Además, la economía española se beneficia de un impulso del lado de la demanda, y que proviene del retorno del turismo extranjero...Lo que pase a partir de ahí depende de cómo se materializará el periodo de estrés financiero vaticinado por el FMI. El riesgo es doble. Uno, relativamente asumible desde el punto de vista macroeconómico, atañe al efecto de la subida de tipos de interés en la demanda de crédito y la renta disponible de los sectores endeudados...El otro riesgo es sistémico y por tanto más difícil de afrontar. Se produciría en caso de una fuerte depreciación de los activos de las instituciones financieras, particularmente la “banca en la sombra” que se ha sobre endeudado para generar ingresos fuera del radar regulatorio de los bancos centrales..."

«Pido perdón a las víctimas por los efectos indeseados de la ley del ‘solo sí es sí’» (El Correo, Diario Vasco)

Entrevista con el presidente del gobierno, Pedro Sánchez. Asegura que la economía «sonríe a España» y subraya que «no tenemos contemplado bajo ningún concepto gobernar con Bildu». «No gobernaremos con EH Bildu bajo ningún escenario». «Tengo una relación histórica y estratégica con el PNV que no tengo con Bildu». Ferrovial «Se va la semana en la que los españoles empezamos a hacer la declaración de la renta». El ‘procés’ «Ninguna Constitución del mundo reconoce el derecho a la secesión».  La estrategia de Pedro Sánchez es clara: menos «ruido» y a los hechos, «a las cosas del comer». «Educación, pensiones, reforma laboral... Ahora tocaba la Ley de Vivienda y hemos cumplido. Dejará de ser un problema para convertirse en un derecho constitucional», subraya. Estamos en precampaña y el 28-M es clave para barruntar qué pasará en las generales de diciembre. 

Doñana está en la UCI (Diario Vasco)

Más de la mitad de sus lagunas ha desaparecido, ya no atrae ni a la séptima parte de las aves que usaban sus 54.000 hectáreas de humedales como refugio invernal y lugar de crianza, los alcornoques centenarios se secan por decenas y perecen las plantas acuáticas y las especies que poblaban sus marismas. Doñana, el mayor espacio natural protegido del sur de Europa, reserva mundial de la biosfera, el cobijo del lince, se muere de sed y pierde su biodiversidad a marchas forzadas por el avance del cambio climático y por unas autoridades que en las últimas décadas han permitido que la agricultura ilegal y el turismo descontrolado le acabasen de quitar su cada día más escasa agua. Son las conclusiones de un análisis demoledor de la Estación Biológica de Doñana, el centro de investigación del CSIC que monitoriza el parque y a sus especies y trabaja por preservar la riqueza de un paraje que se extiende junto al litoral de Sevilla y Huelva. No pueden ser más claros. El humedal está «en estado crítico», la situación es «insostenible» y de no tomarse medidas urgentes para revertir la sobreexplotación de su acuífero –el corazón del parque– pronto se rebasará el punto de no retorno. El deterioro del sistema de humedales, que a principios de siglo rozaron los 3.000, es «generalizado».

Qué es, qué no y qué puede ser inteligencia artificial (Diario Vasco)

Artículo conjunto de Ricardo Alonso Maturana Y Álex Rayón, CEO de GNOSS y vicerrector de Relaciones Internacionales y Transformación Digital Universidad de Deusto, respectivamente. "La mayor parte de la gente no sabe muy bien qué pensar de GPT-4, el nuevo gran modelo de lenguaje (LLM). Es una herramienta aparentemente extraordinaria que parece superar la prueba de Turing en algunos casos. Es decir, produce con facilidad frases fluidas indistinguibles de las que podría escribir un humano. Google y Microsoft (entre muchos otros) ya han anunciado que integrarán los LLM en sus programas de búsqueda, creatividad y productividad ofimática. Según diferentes estudios, ello puede suponer, en algunas tareas, ahorros de tiempo entre el 30% y el 50%. Sin embargo, los únicos que sabemos que esas proposiciones son indistinguibles de las que podríamos producir nosotros y, también, los únicos capaces de evaluar su verdad y falsedad, somos nosotros. Los aviones vuelan, pero no como los pájaros, aunque ningún pájaro pueda volar tan rápido como un avión. Las motos o los coches son capaces de llevarnos con rapidez y lejos, mucho más que nuestra piernas, pero nadie en su sano juicio parece preocupado por que vayan a sustituirlas. Sin embargo, la «singularidad», esa idea de Raymond Kurzweil que afirma que está cerca el momento en el que la tecnología supere las capacidades cognitivas de los humanos, es algo que sobrevuela el debate sobre inteligencia artificial. Quizá las personas seamos inteligentes en algún sentido, pero el pensamiento humano no siempre lo parece y con frecuencia cae en esta clase de melancolías. Cada tanto, nos gusta pensar que el fin de nuestro mundo está cerca...Los LLM no entienden el significado de las palabras que utilizan, ni los conceptos expresados en las frases que formulan. Cuando, a las primeras versiones de ChatGPT, se les preguntaba «cómo resucitar un ciervo», proporcionaban con total seguridad una lista de instrucciones. Este tipo de delirios se produce porque los modelos lingüísticos no entienden lo que es un «ciervo» o que la «muerte» es un estado del ser irreversible. Los LLM carecen de una ‘mente’ con capacidad para reconocer, distinguir y pensar los objetos y entidades de nuestro mundo y el modo en el que se relacionan entre sí. Realizan cálculos masivos y ofrecen aquello que puede resultar más probable. Se trata de una aproximación por fuerza bruta, que consume, como los aviones, los coches y todas las tecnologías que emulan capacidades que originalmente residen en las personas, toneladas de energía, lo que es probable que, a medio plazo, las haga insostenibles. Como no reconocen ni distinguen las cosas ChatGPT no entiende el significado de las palabras que utiliza ni los contenidos de las frases que formula que existen en el mundo, no pueden descubrir relaciones ocultas entre ellas realizando inferencias o deducciones, ni pueden ‘aprender de verdad’. Esto es, no pueden extender el conocimiento sobre una persona o un lugar concretos, por ejemplo. Tampoco conectan ideas y conceptos, ni pueden razonar, porque carecen de un modelo lógico implícito que les permita hacerlo...La mente humana es un elegante artefacto que, manejando información escasa e incompleta, es capaz de distinguir las entidades del mundo e interpretar contextualmente cómo se relacionan. Todo ello construido sobre la base de una creatividad crítica, que nos posibilita a las personas distinguir lo que es verdadero de lo que es falso. Esta es nuestra inteligencia. Aquella que es consciente del mundo que le rodea y razona en él...Hablaremos de una inteligencia artificial real el día que asuma también estas funciones cognitivas y conscientes".