20160926

El tirón del discurso moderado y pragmático de Urkullu cosechó ayer una amplia victoria para el PNV, que tiene garantizado el gobierno del País Vasco otros cuatro años. El holgado triunfo le permite elegir socio para configurar una mayoría que determine la política de la legislatura. Podría incluso repetir la fórmula con los socialistas, pese a que el PSE ha obtenido el peor resultado de su historia. Las elecciones han consolidado a EH Bildu como segunda fuerza al ceder solo cuatro escaños y evitar el ‘sorpasso’ de Elkarrerin Podemos, que irrumpe por delante del PSE pero con menos apoyo del esperado. El PP salva los muebles gracias sobre todo al feudo alavés.

Las elecciones autonómicas en Galicia y en el País Vasco, que los principales partidos situaron en el horizonte como el acontecimiento que ayudaría a desencallar el bloqueo político, no han supuesto un gran vuelco. El PP reafirma su dominio absoluto en Galicia y su candidato, Alberto Núñez Feijóo, se convierte en la figura más relevante del futuro en este partido de cara a una posible sucesión de Mariano Rajoy. Iñigo Urkullu, el candidato del PNV, revalida su primera posición, y mirará hacia los socialistas en busca de un pacto que le dé estabilidad. El PSOE sufre, en dos comunidades en las que tuvo mucho peso, un retroceso histórico. Y Pedro Sánchez resulta más debilitado en la guerra interna de su partido y en su intento de construir una alternativa de Gobierno.

La economía vasca siempre ha basado su crecimiento en la industria, que ya no es lo que era. La pasada crisis ha pasado factura a las fábricas de Euskadi, que dejaron de aportar cinco puntos al PIB autonómico durante la etapa de declive. Ahora, la actividad industrial representa el 22% de toda la riqueza generada en la comunidad. Traducido a empleo, ese porcentaje representa en la actualidad 200.000 puestos de trabajo. La meta de Administraciones y empresas es la de elevar la presencia de la industria en el PIB al 25%.

El número de empresas vascas que desarrollan actividades de I+D aumenta día a día y ha crecido un 25% entre 2007 y 2014, hasta alcanzar la cifra de 1.625, pese a la crisis económica, según un informe de Bantec Estudios. Este dato es especialmente relevante ya que en los años de recesión desaparecieron muchas empresas en Euskadi. Según el estudio, en 2007 las compañías de la comunidad autónoma invertían en I+D 873 millones de euros, y en 2014 destinaron 968 millones de euros. El crecimiento en el número de pequeñas empresas (con menos de 50 trabajadores) interesadas en la I+D fue de casi el 33%, hasta 1.154, por lo que este segmento se ha convertido en «un auténtico vivero de la innovación» en Euskadi, da acuerdo con Bantec. Entre las mediana, al alza fue del 13%, mientras que entre las grandes cayó un 3%.

Los bancos españoles acumulan en sus balances 350.000 millones de activos problemáticos de los que deben desprenderse si quieren hacer frente al mayor problema que se les plantea ahora, la falta de rentabilidad. La mayor parte de ellos han reforzado su capital para cumplir las obligaciones regulatorias que exige el Banco Central Europeo (BCE). Pero la burbuja inmobiliaria estallada en 2008 y la crisis financiera posterior han cargado sobre los balances de las entidades créditos fallidos, inmuebles y créditos aplazados por un valor equivalente a una tercera parte del PIB español, según datos recogidos por la agencia de calificación Moody’s a partir de datos de la Autoridad Bancaria Europea y el Banco de España.

El Colegio Vasco de Economistas agrupa a medio millar de profesionales de muy diferentes ámbitos. Al ser una profesión sin reserva de actividad, el colectivo ha desarrollado un modelo de colegio basado en el intercambio de conocimiento y buscando ser un referente para la sociedad. Su presidente es Iñaki Ruiz, director de publicidad de Laboral Kutxa, y uno de los impulsores del plan estratégico del Colegio, que culminará el próximo año