20220603

La planta de Mercedes Benz en Vitoria, la principal industria de Euskadi y que emplea de manera directa a 5.000 trabajadores, está ante una oportunidad histórica para transformar sus actuales instalaciones. Hasta el punto de duplicar su capacidad, incrementar su producción de manera considerable y generar actividad y empleo durante los próximos veinte años. La dirección de la factoría trasladó ayer a los miembros del comité de empresa los planes de negocio que tiene la multinacional alemana para una fábrica de referencia dentro de Daimler, y que pasan por una inversión de más de 1.200 millones de euros. De esta cantidad de dinero que podría llegar a la planta si se alcanza un acuerdo de convenio con los sindicatos que incluya mayor flexibilidad laboral, 200 millones serían para actualizar la maquinaria que ahora existe con el fin de introducir mejoras en los procesos de producción de las furgonetas Clase V y Vito. Y el grueso de la inversión, otros más de mil millones, se destinaría a crear «prácticamente una fábrica nueva», apuntan representantes sindicales, con una nueva nave de pintura, la ampliación de las dedicadas a montaje bruto y final y la creación de una zona para logística, cerca del bosque de Zabalgana, en un actuación a más largo plazo. Pero además de estas nuevas infraestructuras –con un túnel subterráneo también previsto para comunicar la nueva área de logística con las naves de montaje–, esa partida también se dedicaría a producir las versiones totalmente eléctricas de las furgonetas actuales. Un reto que aspira conseguir para el año 2030. 

La dirección de Mercedes también confirmó que ha presentado su proyecto de ampliación y transformación de la planta de Vitoria a la convocatoria del PERTE del vehículo eléctrico y conectado, cuyo plazo finaliza a las 00.00 horas de este sábado. En la iniciativa que lidera la factoría de la multinacional alemana, como gran fabricante, le acompañan otras 35 empresas del sector, cuya identidad no se ha desvelado. Las inversiones que incluye Mercedes suman una cuantía que ronda los 600 millones de euros y podría acceder a ayudas por una cuantía del 25%. Se trata del gran proyecto vasco al PERTE de automoción y que competirá con otras iniciativas de distintas compañías automovilísticas. Volkswagen y Seat, en una alianza de 62 empresas, han presentado una fábrica de baterías en Sagunto a la que destinará 3.000 millones de euros y que podría servir también para los coches de Ford. También Renault y Stellantis contemplan inversiones millonarias en sus proyectos remitidos a la convocatoria. dentro del comité. Algunos representantes de la plantilla ya reconocían ayer que «esta información que nos ha trasladado la dirección es la que veníamos reclamando de un plan industrial cuando comenzamos las negociaciones hace casi un año y medio». Y asumen que «en estas condiciones sí podríamos empezar a hablar de una mayor flexibilidad». 

Unos registros nunca vistos. A pesar de las dificultades de los primeros cinco meses de este año, con un IPC rozando el 10%, el coste energético disparado y problemas en la cadena de suministros, el mercado laboral ofrece cifras sin precedentes. Euskadi ha alcanzado su récord histórico de cotizantes a la Seguridad Social: 986.436 al finalizar mayo. En román paladino, nunca había habido tanta gente trabajando en el País Vasco. Esa cifra supera en 23.222 empleados la del pasado ejercicio a esas alturas. El máximo anterior data de 2008, antes de la explosión de la crisis financiera, con 982.935 afiliados. Ya el pasado mes de abril, la comunidad quedó al borde de ese hito, alcanzado ahora gracias al incremento de 3.946 empleados en el sistema. Los problemas que atreviesa la economía, amplificados por la invasión rusa de Ucrania, llevaron al Gobierno vasco a reducir su previsión de crecimiento en 2,2 puntos hasta dejarlo en el 4,5% para este año. Una referencia que sigue siendo válida para crear empleo. Y así lo demuestran los 68.652 contratos de trabajo firmados en mayo, con los que se redujo el número de parados en 2.202. El total de vascos que persiguen un empleo asciende a 113.352 personas, lo que supone 9.000 menos que el año pasado. No obstante, y a pesar de los buenos datos de cotización a la Seguridad Social, el número de parados sigue siendo superior al de 2008, cuando las personas sin empleo en Euskadi eran 81.000.

Felipe Serrano, catedrático de Economía Aplicada de la UPV, subraya la favorable evolución del empleo, aunque observa elementos que impiden lanzar las campanas al vuelo. "Hay elementos que son buenos, se ve una buena evolución y comienzan a funcionar actividades estacionales. Pero ninguna reforma laboral es la que crea empleo...Da la impresión de que puede haber ciertos datos ficticios con el recurso al contrato fijo discontinuo. La temporalidad sigue siendo muy alta. La precariedad sigue insertada en el mundo laboral...no importa que le cambiemos el nombre...Debemos plantearnos el análisis de qué empleo se está creando o quién lo está creando. Porque no es lo mismo empleo privado que empleo público. Me da la sensación de que el empleo privado está permaneciendo más estable y el que crece más es el empleo público". 

El paro se redujo en 99.512 personas en mayo, hasta un total de 2.922.911 desempleados, bajando de los tres millones por primera vez desde 2008 –cuando se inició la crisis financiera–, según los datos publicados ayer por el Ministerio de Trabajo. Por su parte, el empleo creció con 213.643 afiliados más, impulsado por la hostelería. Estas cifras se explican, principalmente, por el buen comienzo que ha tenido la campaña turística, tras dos años muy duros por las restricciones que impuso la pandemia del Covid-19. Aun así, el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, ha subrayado que este buen comportamiento del mercado laboral se ha producido en “un contexto de incertidumbre internacional e inflación volátil y persistente”. De cualquier forma, el desempleo bajó en 858.259 personas en el último año. Atendiendo a los datos de mayo, el paro descendió en todos los sectores económicos frente a abril con especial fuerza en servicios, 64.230 parados menos; seguido de construcción, con 10.008 parados menos; agricultura, 8.693 menos; e industria, 7.968 menos. Por regiones, el paro registrado bajó en todas las comunidades autónomas, especialmente en Andalucía (-20.341 desempleados), Cataluña (-16.671) y Madrid (-13.249). En valores relativos, los mayores descensos se registraron en Baleares (-52%), Canarias (-30%) y Cataluña (-28%).

Sener ha encontrado un auténtico filón en Alemania, en proyectos energéticos. Las urgencias de este país por huir de forma acelerada de su dependencia de Rusia se han convertido en un mar de oportunidades para la compañía vasca, que cuenta con un amplio catálogo de instalaciones realizadas hasta ahora. En este contexto, Sener anunció ayer la adjudicación, en un consorcio del que forman parte también General Electric y la firma italiana Bonatti, de la transformación de dos centrales de generación de electricidad situadas en las localidad alemanas de Heilbronn y Altbach/Deizisau. Estas centrales funcionan en la actualidad mediante la combustión de carbón y serán transformadas a la tecnología de ciclo combinado, con el uso inicial de gas como combustible, aunque estarán preparadas también para utilizar hidrógeno a medio plazo. El proyecto de reconversión de ambas centrales tiene un presupuesto estimado en torno a los 1.000 millones de euros y el cliente será la compañía eléctrica germana EnBW. Esta empresa ha enmarcado el proyecto dentro de la carrera alemana por sumarse a la transición energética y en especial a la generación eléctrica renovable. Las plantas de ciclo combinado –utilizan turbinas de gas y al mismo tiempo otras de vapor producido en el proceso de combustión de las primeras– son en la actualidad una de las mejores alternativas como centrales de respaldo. Esto es, centrales capaces de entrar en funcionamiento en un breve espacio de tiempo cuando cae la producción eólica por ausencia de viento o la solar a falta de luz. Las dos plantas tendrán una capacidad de generación de electricidad total de 1.360 megavatios y la previsión es que entren en funcionamiento con su nueva configuración en 2026.

Fagor Automation sale de compras. La cooperativa comunicó ayer que ha tomado el control de la empresa italiana FR Engraving S.r.l., ubicada en localidad de Legnano, en la industrial región de Lombardía. La firma de Arrasate, que no ofreció mayor detalle sobre la transacción adquirió el pasado 23 de mayo el 51% de las acciones de su nueva filial, en una operación en la que estuvo asesorada por Norgestion. Por otra parte, Fagor Arrasate ha arrancado 2022 con un aumento del ritmo de captaciones en todos los sectores, adjudicándose en el primer cuatrimestre del año 26 nuevos proyectos por valor de 102 millones de euros.

All Iron Ventures, la herramienta de inversión que pusieron en marcha Jon Uriarte y Ander Mitxelena tras la venta de ‘Ticketbis’, se prepara para llegar a más inversores con un nuevo fondo que asciende a 30 millones de euros. No se colocarán directamente en empresas, sino que se intermediarán a través de otros inversores. Lo que se conoce como un fondo de fondos. All Iron repartirá hasta en 15 fondos estos 30 millones. Y es que la normativa impulsada por el Gobierno central tiene previsto rebajar las exigencias para acceder a estas figuras a partir del próximo otoño. Así, se reducirá la exigencia de una inversión mínima de 100.000 euros hasta los 10.000. Y de esta manera, según explicó Ander Mitxelena, All Iron busca responder al «interés creciente» que están generando estos productos. Diego Recondo, gestor de inversiones y socio de All Iron, explicó que los 30 millones se repartirán a través de este mecanismo indirecto en unas 300 empresas del tipo ‘startup’. Con este fondo, y teniendo en cuenta la socimi, All Iron cuenta ya con 290 millones de euros en sus herramientas de inversión. Ambos emprendedores constituyeron el primer fondo en 2018 y cerraron su financiación en octubre de 2020 con 110 millones.

Desde que comenzó a aplicarse la ayuda fiscal de 20 céntimos por litro para la compra de carburante, los precios de la gasolina y el gasóleo no han dejado de subir, en parte por el aumento de la cotización internacional del barril de petróleo, pero también porque algunas estaciones de servicio han aprovechado este descuento para aumentar sus márgenes de beneficios, hasta el punto de que la subida del combustible ya engulle hasta el 80% de la bonificación fiscal. Un motivo por el que el Gobierno se había planteado no prorrogar la bonificación a partir del 30 de junio o concentrarla en las rentas más bajas, si bien parece que finalmente se ha inclinado por mantener el modelo actual otros tres meses. A esto hay que sumar también que el consumo de combustible se ha disparado un 14,2% en abril respecto al año pasado, de acuerdo con los últimos datos de la Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos (Cores), lo que eleva la presión sobre los precios de venta al público al tiempo que aumenta el coste del descuento para la Hacienda Pública. Esta alza de la demanda se debe en gran medida a la bonificación fiscal introducida por el Gobierno, pero también a la vertiginosa recuperación del turismo y los desplazamientos por ocio y al progresivo levantamiento de las restricciones sanitarias por el coronavirus, con la vuelta, en cierta medida, del trabajo presencial. Si en anteriores momentos un precio del petróleo por encima de 100 dólares por barril llevaba a una moderación del consumo, ahora sucede lo contrario, debido a la demanda embalsada durante el confinamiento y a que la rebaja fiscal manda una señal contradictoria a los precios, animando al consumo.

Los grandes productores de petróleo acordaron ayer elevar el suministro en verano para evitar una escasez de combustible ante el embargo occidental al crudo ruso y el fuerte aumento de la demanda por la reapertura económica tras el coronavirus, pero la decisión ha resultado insuficiente para el mercado, que teme que la demanda siga siendo muy superior a la oferta en los meses venideros. La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus socios, incluyendo a Rusia, acordaron ayer aumentar su producción petrolera en 648.000 barriles diarios en julio y otros tantos en agosto, un 50% más de los 432.000 barriles de los meses anteriores. Con ello, la OPEP+ dará por concluida la vuelta a la producción prepandemia en el octavo mes del año, un mes antes de lo previsto inicialmente. La decisión responde a la caída de las exportaciones por parte de Rusia tras la invasión de Ucrania. Los riesgos en torno al Mar Negro, así como los problemas reputacionales y legales de las compañías ante los países occidentales han provocado que las exportaciones del gigante euroasiático se hayan hundido hasta 1,5 millones de barriles por debajo de la cuota asignada por el cártel, y el embargo planteado por la Unión Europea amenaza con restar otros 2 millones de barriles. Precisamente por ello, el mercado ha visto muy insuficiente este aumento de la producción de crudo y ha reaccionado al acuerdo con subidas de precios moderadas pero muy significativas. 

Las dos formaciones abertzales se convirtieron por enésima vez en el salvavidas de Pedro Sánchez porque ERC votó en contra. A cambio, reforzaron su estrategia de partidos útiles. En esta ocasión se trataba de aprobar el dictamen de la ley que regulará el fondo de promoción pública de planes de pensiones de empleo en empresas. Los jeltzales votaron a favor tras «salvaguardar el modelo vasco de las EPSV» y EH Bildu se abstuvo tras lograr el compromiso de que las pensiones no contributivas subirán un 15% hasta final de año. La norma, una de las reformas comprometidas con Bruselas a cambio de los fondos europeos, logró superar en la Comisión de Trabajo, Inclusión, Seguridad Social y Migraciones del Congreso un escollo importante antes de ser sometida al pleno la semana que viene. El Ejecutivo, sin embargo, no puede aún cantar victoria. Entre otros motivos, porque logró salvar el trámite de ayer gracias a la abstención de Vox. Y nada garantiza que el partido de Santiago Abascal vaya a mantener la misma posición. 

Las pensiones no contributivas, que aumentarán un 15% al menos hasta final de año tras el pacto del Gobierno con EH Bildu, son prestaciones económicas que se reconocen a aquellos ciudadanos jubilados o discapacitados que se encuentran en situación de necesidad y carecen de recursos suficientes para su subsistencia, aunque no hayan cotizado nunca a la Seguridad Social o no lo hayan hecho el tiempo suficiente para tener derecho a una pensión contributiva. A estos efectos, en este año 2022 se considera que existe carencia de ingresos suficientes cuando el beneficiario no alcanza los 5.899,60 euros anuales. Esta pensiones no van a cargo de la Seguridad Social, sino que se financian con los Presupuestos Generales del Estado, y según los últimos datos del Ministerio de Asuntos Sociales, correspondientes a abril, en España había en ese mes 444.868 beneficiarios, de los que 264.102 era de jubilación y 180.766 de invalidez. La nómina total de estas prestaciones ascendía a 196,37 millones de euros en dicho mes. Tras el pacto de ayer, la factura mensual se incrementará en unos 30 millones al menos hasta el 31 de diciembre. En Euskadi había 12.701 pensiones no contributivas (6.711 de jubilación y 5.990 de invalidez) que sumaban un importe de 5,5 millones de euros. Cabe destacar que del total nacional, más de una de cada cinco (el 21,5%) de este tipo de prestaciones corresponden a Andalucía. Las que se abonan en el País Vasco solo suponen el 2,8%.

El PSOE ha subido sin límite las cotizaciones a la Seguridad Social en la ley de creación de un fondo de pensiones sin esperar a consultar con los agentes sociales. Así ha aflorado al aceptar una enmienda de Unidas Podemos para eliminar el tope a las cotizaciones máximas. Según la medida aprobada es necesario este destope «como mecanismo redistributivo» porque así «las rentas más altas contribuyen con su renta». Hoy, las bases máximas de cotización afectan a los que ganan más de 45.000 euros. El PSOE, tras la aprobación de la enmienda, rectificó y dijo que se trata de «un error» que va a subsanar en el siguiente paso parlamentario. No obstante, es una medida que baraja el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, para asegurar la sostenibilidad del sistema de pensiones, pero se había comprometido a llevarla antes al diálogo social. El destope de las cotizaciones no fue la única consecuencia del caos en las votaciones de la comisión de Seguridad Social. Las enmiendas aprobadas recortan también las deducciones fiscales en los planes de pensiones de empleo que trata de aprobar Escrivá. El problema es que, de no haber corrección, se expone también a un sonoro fracaso. Tras haber reducido al mínimo las ventajas fiscales por contribuir a planes de pensiones individuales –los considera elitistas–, planteaba trasladar esos beneficios a los planes de empresa. Con las enmiendas aprobadas no habrá ventajas ni en unos ni en otros. Se reducen las deducciones por aportaciones, pasando de 10.000 euros a 5.750 euros anuales.

El Gobierno prolonga sus críticas al gobernador del Banco de España, esta vez a través de la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz. Si el primero en abrir fuego fue el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, ahora Díaz desaprueba abiertamente las declaraciones de Pablo Hernández de Cos, caracterizadas, en opinión de la ministra, por un “profundo desconocimiento” de la situación de los pensionistas y del mercado de trabajo en España. “Tengo una magnífica relación con el gobernador, lo que no hace que tenga que compartir las opiniones que vierte, a veces sobre cuestiones que no son competencia de esa institución [el Banco de España]. Discrepo profundamente”, aseguró Díaz ayer durante su comparecencia en la Comisión de Trabajo en el Congreso de los Diputados. El miércoles, el propio Hernández de Cos compareció también en el Congreso, en este caso en la Comisión de Asuntos Económicos y Transformación Digital para presentar el Informe Anual 2021 del Banco de España. Durante su turno de palabra, además de anunciar que habría una nueva revisión a la baja de las previsiones de crecimiento de la economía, el gobernador incidió en la necesidad de cerrar un pacto de rentas que incluya a funcionarios y pensionistas. “Hay que evitar el uso de cláusulas de indiciación en el caso del gasto público, que son particularmente relevantes en el caso de las pensiones. Creemos que esto hay que incorporarlo al pacto de rentas”, manifestó.

El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, que dirige José Luis Escrivá, ha lanzado una reforma profunda del reglamento de la ley de extranjería para facilitar que miles de inmigrantes puedan trabajar legalmente en España y cubrir así las necesidades de mano de obra. La normativa de extranjería actual, dicen fuentes gubernamentales, “no es suficientemente ágil para responder a los cuellos de botella en el mercado laboral”. El transporte, el campo, la hostelería y la construcción son los sectores más afectados. El borrador de reglamento, al que ha tenido acceso El País, señala que la regulación actual fomenta la “incorporación irregular al mercado de trabajo”, lo que supone “altos costes sociales, económicos y de gestión”. El objetivo es que la falta de mano de obra no estrangule algunos ramos. Los extranjeros son parte de la solución para la sostenibilidad de las pensiones. 

Acciona Energía y Envision, una de las mayores empresas energéticas chinas, presentan hoy al Gobierno el desarrollo de un proyecto en España para la fabricación de baterías y minería del litio en Navalmoral de la Mata (Cáceres). Envision estaría dispuesta a liderar una inversión junto a su socio español de 2.500 millones de euros, crear 3.000 empleos directos y hasta 12.000 indirectos. La instalación de una planta de estas características en Extremadura forma parte de la estrategia del Gobierno español al ser una zona, además, que es punta de lanza del sector renovable español. Este proyecto concurre al Perte del vehículo eléctrico y conectado, cuya convocatoria fijó hoy como fecha límite para presentar proyectos. El presidente de Acciona, José Manuel Entrecanales, ya anunció en la última junta de accionistas de la empresa, celebrada a principios de abril, que se encontraba en “conversaciones avanzadas” con una empresa china para instalar una fábrica de baterías en España. “Estamos en conversaciones avanzadas con una de las principales empresas energético-tecnológicas del mundo para impulsar un proyecto revolucionario en España de fabricación de baterías y minería de litio”, indicó. Esta misma semana, la ministra de Industria, Reyes Maroto, señaló que existe la posibilidad de que lleguen nuevas gigafactorías a España en el marco del Perte, al estilo de la planta de baterías que Grupo Volkswagen instalará en Sagunto (Valencia).

Más de dos años después de que la pandemia diese un impulso irreversible a la digitalización, el mercado laboral atraviesa una revolución. Los cambios, que van más allá del teletrabajo y la integración de la tecnología, afectan también a los perfiles profesionales que demandan las empresas. Aquellos estudiantes que se forman hoy accederán el día de mañana a un entorno laboral muy distinto al actual y, por esta razón, la universidad juega un papel más importante que nunca para que estos jóvenes se encuentren preparados. Las compañías demandan profesionales que cuenten con los conocimientos propios de su especialidad, pero cada vez conceden más valor a una serie de competencias transversales como el interés por continuar formándose, la adaptabilidad y el liderazgo. Según la última encuesta de inserción laboral de los titulados universitarios del INE, los estudiantes que se graduaron en 2014 presentaban a finales del año 2019 una tasa de actividad del 93,6%. Alfredo Timermans del Olmo, viceconsejero de Empleo de la Comunidad de Madrid, citó estos datos durante la apertura de la jornada y aseguró que “la formación universitaria mejora la empleabilidad”. Acerca del planteamiento de la Comunidad de Madrid en este sentido, indicó que “intentamos no ser un obstáculo para la iniciativa privada, ofrecer al mercado toda la información de la que disponemos y desarrollar las políticas de empleo del modo más eficiente posible”.

«Hasta ahora teníamos héroes y ciudades heroicas. Ahora podemos llamarnos ya un país heroico, porque hemos sobrevivido a cien días de atrocidades que han demostrado lo que realmente es Rusia». Así resumió ayer Hanna Maliar, viceministra de Defensa de Ucrania, lo sucedido hasta ahora en la guerra que sacude el mundo desde el pasado 24 de febrero. «En estos cien días hemos logrado el apoyo del mundo y, aunque no sabemos cuándo acabará la guerra, podemos sacar ya bastantes conclusiones sobre ella: la principal es que el objetivo de Rusia es la aniquilación de la nación ucraniana siguiendo el esquema de destrucción de Siria, pero también que no está preparada para una guerra larga, porque se está quedando sin soldados y sin armas. Por eso ahora vemos más ataques con misiles. Rusia está incrementando la producción de armas y de misiles», sentenció. Según el Ministerio de Defensa de Ucrania, desde el inicio de la invasión, 30.850 soldados rusos han perecido en una contienda que le ha costado a Moscú más de 1.300 tanques, 210 aviones, 175 helicópteros y en torno a un millar de sistemas de armamento avanzado de otros tipos. Serán muchos más en el futuro, porque ayer Maliar agradeció a Joe Biden la aprobación del envío de nuevos sistemas de armamento de medio alcance. 

No hay consuelo. Si para el Padre Eddie, en Uvalde, esta semana es como un entierro constante, para EE UU el desgarre de las armas por todo el país no tiene descanso. La masacre del miércoles en un hospital de Tulsa, en la que murieron cuatro personas (además del autor), es la número 233 en lo que va de año y la 20 en los ocho días que habían transcurrido desde la de Uvalde, según la cuenta de los Archivos de la Violencia Armada. Joe Biden tiene las manos atadas por la ausencia de mayoría de su partido en el Senado, pero aún así no podía permanecer impertérrito ante el clamor que le demanda hacer algo. ¿Hacer qué? La Ley para Proteger a Nuestros Hijos que se presentó ayer en el Comité Judicial de la Cámara Baja elevaría la edad legal para adquirir armas a los 21 años –la misma que se requiere para comprar una cerveza–, generalizaría la necesidad de revisar el historial policial para otorgar una licencia y aumentaría las penas por prestar un arma a diez años de prisión. Nada de eso hubiera impedido que Michael Louis matase el miércoles «a su médico y a todo el que se le pusiera delante», dijo en una carta que dejó. Entre ellos estaban, además de Preston Phillips; la doctora de medicina deportiva, Stephanie Husen; la recepcionista, Amanda Glen; y otro paciente, William Love, que en ese momento sostenía la puerta abierta para que el resto huyera. «Siento que no hayamos podido salvaros», sollozó ante los micrófonos Ryan Parker, adjunta del jefe médico del hospital St. Francis. Louis tenía 45 años y se había comprado el día antes un rifle automático AR-15, como el que utilizó Salvador Ramos para perpetrar la masacre escolar de Uvalde. 

«Un mar de gente», según la descripción adoptada por la BBC se congregó ayer en torno al Palacio de Buckingham y otros edificios de la Monarquía y del Gobierno en el centro de Londres, para ser parte de ‘Trooping the Colour’, el desfile militar que marca el inicio de los actos del Jubileo de Platino de Isabel II, con motivo de sus siete décadas de reinado. La mañana era soleada y con temperaturas acercándose a los veinte grados. Los cuatro días de vacaciones incitaron también a británicos de otros lugares a viajar a la capital. Había turistas en Piccadilly y gente de compras en Mayfair. Pero los vagones del metro estaban abarrotados y buena parte de sus pasajeros se bajaba en estaciones próximas a los actos del Jubileo. Habrían oído ya el mensaje de la reina: «Me siguen inspirando las muestras de buenos deseos hacia mi persona, y espero que los próximos días ofrezcan la oportunidad de reflexionar sobre todo lo que se ha logrado en los últimos 70 años. Y espero también que miremos al futuro con confianza y entusiasmo». Alentó a sus súbditos a crear buenos recuerdos en la celebración.