20230704

En pleno debate sobre si los negocios en España han conseguido superar el impacto que ha tenido en sus cuentas el incremento de todo tipo de costes (la luz, el gas, las materias primas, los proveedores, el transporte...), el Gobierno ha hecho público un índice en el que llevaba trabajando varios meses para poner sobre la mesa la radiografía de las empresas. A pocos días de que comience la campaña electoral y con el futuro de los impuestos extraordinarios en vilo, el Observatorio del Ministerio de Economía concluye que la mayor parte de las empresas han recuperado los márgenes que tenían antes de que llegara la pandemia. Sin embargo, el informe incluye numerosos flecos que distorsionan ese enunciado general. El primero de ellos es la heterogeneidad de la situación por la que atraviesa cada actividad. En el caso de la energía la subida de márgenes ha sido exponencial en los últimos meses; en el sector servicios, con el turismo incluido, ya han superado la crisis; y solo queda algo más rezagada la actividad de alimentación. A pesar de las subidas de precios de la cesta de la compra, las empresas del sector no han conseguido superar los márgenes que tenían antes de la pandemia. Pero este año lo lograrán, vaticina el informe. Estos datos han puesto en bandeja al Gobierno la oportunidad de apuntar a los empresarios para que dejen de subir precios bajo el pretexto de que no cubren costes ni generan márgenes suficientes aún. «La moderación de los márgenes debe contribuir a que la inflación se modere para conseguir su objetivo a medio plazo», apuntó el Secretario de Estado de Economía, Gonzalo García Andrés, tras presentar el informe. El IPC se situó en junio por debajo del 2% aunque la subyacente aún está cerca del 6%. Las cadenas de alimentación y los pequeños comercios son los que van más atrasados en esta senda de recuperación. De hecho, el Observatorio señala que «se habrían recuperado recientemente, aunque aún permanecerían en niveles inferiores a su media histórica». Dos condicionales que reflejan cómo en el primer tramo de este año los supermercados y tiendas han visto mejorar sus negocios al no tener tanto impacto la subida de la electricidad o el coste de las materias primas que venden, aunque aún se encuentran por debajo de 2019. «Habrá una recuperación a lo largo del año», es la estimación del Ministerio de Economía.

La producción industrial de Euskadi cayó en mayo un 2,4% respecto al mismo mes del año pasado. Según informó ayer el Eustat, la cifra acumulada durante los primeros cinco meses refleja, en cambio, un crecimiento del 0,6% respecto al mismo periodo de 2022. Además, en comparación al mes previo de abril y corregidos los efectos estacionales, el resultado muestra una bajada este mes del 0,4%. La producción de energía, que recoge tanto el suministro de energía eléctrica como el refino de petróleo, se ha dejado un 10,9%, mientras que los bienes intermedios que engloban la metalurgia y la fabricación de productos metálicos, la industria química y los de caucho y plástico reflejan un descenso interanual de la producción del 2,4%. La producción de los bienes de equipo, donde están la fabricación de vehículos de motor, la construcción de locomotoras y material ferroviario y la construcción aeronáutica o naval disminuye un 0,5% en relación a mayo del pasado año. Los bienes de consumo, en cambio, suben un 0,6% gracias a un ascenso de los no duraderos del 6,7%. Los duraderos, por su parte, caen un 21,6%.

La actividad del sector manufacturero español se deterioró en junio por tercer mes consecutivo por la debilidad de la demanda y ha caído hasta su nivel más bajo en lo que va de año, según el índice PMI, que ha bajado hasta los 48 puntos desde los 48,4 del mes anterior, según la encuesta de S&P Global y Hamburg Commercial Bank. “En España hay signos de una leve recesión en el sector manufacturero, o tal vez solo de estancamiento”, resumió Cyrus de la Rubia, economista jefe de Hamburg Commercial Bank, para quien es posible que la debilidad en el sector manufacturero continúe durante algunos meses más, dada la caída de los nuevos pedidos. Las debilidades del sector a finales del segundo trimestre se explican por el empeoramiento de la demanda que ha provocado la tercera disminución consecutiva de los nuevos pedidos, la “más pronunciada” desde enero pasado, y una “caída sólida de las ventas”. No obstante, el experto subrayó las escasas probabilidades de que la desaceleración de la actividad manufacturera en España sea particularmente profunda, ya que las empresas encuestadas solo ahora están comenzando a recortar personal y la cartera de pedidos pendientes proporciona cierta estabilidad. En este sentido, la encuesta de junio apunta que, pese a ser leve, ante la menor carga de trabajo, las fábricas españolas acometieron el primer recorte de plantilla desde noviembre del año pasado.

Tubos Reunidos ha decidido plantear a los sindicatos un ERTE flexible, con el que trataría de minimizar el impacto en la cuenta de resultados de un acusado descenso de la demanda de tubos sin soldadura. Una señal que la empresa ya ha apreciado en el mercado pero sobre la que existen dudas a corto plazo. La decisión fue trasladada ayer a los representantes sindicales. El objetivo, han adelantado, es tener formalizado el procedimiento, que implica una negociación previa con los representantes de los trabajadores para pactar las condiciones, antes incluso de decidir si se hará o no efectivo. La compañía quiere proponer una hipotética reducción de las jornadas de su plantilla en las instalaciones de Amurrio para el próximo semestre. La aplicación o no del ERTE e incluso su graduación quedaría pendiente de comprobar el comportamiento real de la demanda en los próximos meses. En principio, el marco de aplicación propuesto implicaría a la totalidad de la plantilla de Amurrio, con una reducción de jornada del 50% como máximo. La factoría tiene unos 800 empleados. La sociedad celebró recientemente su junta anual de accionistas y en ella quedó claro que durante el primer semestre del año la actividad había tenido un tono extraordinariamente positivo. Así, en los cinco primeros meses el beneficio se ha situado en torno a los 50 millones de euros, cifra que ya supera lo conseguido en todo el año 2022. La cartera de pedidos, sin embargo, se situaba a finales de ese mes en 142 millones de euros, cifra que contrasta con los 303 millones que la empresa tenía anotados a finales de diciembre de 2022

Si la pasada semana el fondo norteamericano Bain, actual propietario de la empresa, había alcanzado un principio de acuerdo con Indra para darle entrada en el capital de ITP, a falta de negociar algunos flecos, el fin de semana ha hecho que todo se haya ido al traste. Y nadie sabe cuál será el siguiente episodio. Había acuerdo sobre el capital a transferir –un 9,9% de las acciones de ITP–; también sobre el precio, que suponía un primer ‘pelotazo’ para el fondo norteamericano porque, aunque no ha trascendido la cantidad exacta, suponía una importante plusvalía en apenas nueve meses. Pero todo se ha ido al traste en los primeros compases de los flecos, ese momento en el que había que definir lo que significaba el «acuerdo industrial» que reclama Indra. «No hacemos inversiones financieras, sólo industriales», había advertido el pasado viernes el presidente de Indra, Marc Murtra. Bain ha comunicado ya a Indra, según fuentes consultadas, que no está dispuesto a aceptar un acuerdo que implique el acceso de Indra a la tecnología de ITP. Más o menos, que da por rotas las conversaciones y las posibilidades de perfeccionar un principio de acuerdo que no había pasado de ser verbal. ¿Todo terminado? «No coment», responde un portavoz oficial de Bain, siguiendo la tradicional opacidad de los fondos de inversión. Fuentes cercanas a la operación señalan que Bain –que permitió el acceso del Gobierno vasco al accionariado de ITP con un 6%–, jamás ha querido dar entrada a otros accionistas. A regañadientes aceptó poner un 30% a disposición de accionistas españoles porque les obligó el Gobierno de Pedro Sánchez. Las maniobras de los últimos días transmiten con claridad que habían aceptado esa imposición, pero solo a cambio de vender muy caras las acciones de ITP. Un activo valioso que, estiman los norteamericanos, valdrá mucho más dentro de cinco años cuando ellos vendan, quizá con una salida a Bolsa, recojan los beneficios y salgan corriendo.

Guuk, la teleco de aquí y para aquí, filial del Grupo MásMóvil y que compite en Euskadi y Navarra con todo el sector, incluidos Euskaltel y su matriz, sopló ayer tres velas con un bagaje más que positivo. Con una visión disruptiva del negocio y basada en la no obligatoriedad de permanencia, sin letra pequeña, sin promociones y buscando un buen servicio, la firma pilotada por Juanan Goñi y que tiene su sede social en Donostia ha encontrado el nicho de clientes para el que fue concebida en 2020, en plena pandemia. La firma cerró 2022 con un ebitda (resultado bruto operativo) positivo y captando el 9% de las portabilidades (los cambios de compañía) de ambas comunidades autónomas, lo que elevó un 30% su base clientes hasta alcanzar los 40.000. De ellos, además, el 77% eran usuarios convergentes, que tienen contratada una media de cuatro servicios de fibra, móvil, televisión y fijo. «Trabajamos para dar a cada cliente el mejor servicio posible y además mantenemos la palabra que le damos cuando llega: el precio es para siempre y los clientes se pueden ir cuando quieran. Este compromiso nos obliga a trabajar por la excelencia», declaró Goñi, CEO de Guuk. «El nuestro es un sector en el que el grueso de los clientes se consigue por cambios entre compañías, por lo que conservar su fidelidad es uno de los grandes retos que tenemos todas las marcas. Además, en nuestro caso, conseguimos que los clientes nos recomienden, lo que indica que el modelo funciona», añadió.

La venta de turismos creció en Euskadi un 13,2% durante la primera mitad del año, hasta alcanzar las 12.362 unidades. El dato, facilitado ayer por las tres patronales del sector –Anfac (fabricantes), Faconauto (concesionarios) y Ganvam (distribuidores)– se produce tras lograr en junio un incremento de las matriculaciones del 3,1%, hasta las 2.348. Es el sexto mes consecutivo de crecimiento, lo que refleja la mejora en problemas como la falta de chips. Pese a los buenos resultados, la cifra sigue lejos del incremento experimentado a nivel nacional. Allí se ha notado especialmente el aumento de las ventas destinadas al alquiler, un mercado que no existe en suelo vasco. En España, en junio se consiguieron superar las cien mil unidades (101.085) por primera vez en 29 meses, con un crecimiento del 13,3%. Entre enero y mediados de año se vendieron 505.421 coches, es decir, un 24% más. Pese a la remontada, los datos siguen muy por debajo de las ventas previas a la pandemia. Así, las de este año suponen un 41% menos que en el primer semestre del 2019, aunque las patronales mostraron ayer su optimismo y confiaron en cerrar el ejercicio con más de 940.000 ventas a nivel nacional. Este dato supondría un descenso total del 20%. «Junio ha hecho honor a la tradición de ser un buen mes», advirtió el director de comunicación de Anfac, Félix García, quien atribuyó «los niveles récord» a «las empresas alquiladoras». El director de comunicación de Faconauto, Raúl Morales, subrayó que los resultados son mejores «de lo esperado» al encadenar seis meses consecutivos de incremento en las matriculaciones.

Las tres asociaciones profesionales de Euskadi han activado las reclamaciones patrimoniales contra el Gobierno vasco por los perjuicios económicos sufridos por los locales de hostelería durante los 62 días que permanecieron cerrados entre diciembre de 2020 y febrero de 2021, en plena pandemia, como consecuencia de las restricciones impuestas por el lehendakari. Los afectados juzgaron «injustas» las medidas decretadas por la Administración autonómica y ahora disponen de un plazo de seis meses –hasta enero del próximo año– para evaluar las pérdidas que aquellas medidas causaron a sus negocios. Cada empresario tendrá que analizar las cifras de sus negocios y los días en que su municipio se vio afectado por los ceses de actividad derivados de los decretos aprobados por el Ejecutivo autónomo. Los hosteleros recuerdan que tanto el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) como posteriormente el Supremo anularon las disposiciones de Urkullu, por lo que entienden que deben ser compensados económicamente, aunque de momento no han hecho ninguna valoración sobre el importe de las cuantías a percibir. No obstante, tanto la Asociación de Hostelería de Bizkaia como la de Empresarios de Gipuzkoa y la SEA Hostelería-Ostalaritza de Álava han trasladado a sus asociados «un procedimiento tasado» para realizar las reclamaciones individuales «que correspondan». Bizkaia aglutina a algo más de la mitad de los 12.219 bares, restaurantes, cafeterías, pubs y discotecas de toda la comunidad. Ver nota conjunta Hostelería. 

El presidente de BBK, Xabier Sagredo, ha sido elegido CEO del Año en la categoría de Sostenibilidad Corporativa en los European CEO Awards, que organiza cada año la revista especializada European CEO. Estos galardones premian cada año a directivos, empresas y campañas líderes en diversos sectores económicos a nivel europeo. En esta ocasión, según ha explicado BBK en una nota de prensa, Sagredo ha logrado el reconocimiento tras imponerse a finalistas como Yvon Chouinard, fundador de la marca de ropa de montaña Patagonia; Mads Nipper, CEO de la compañía de energía renovable Orsted, y Velislava Ivanova, directora de Sostenibilidad de lamultinacional de servicios profesionales Ernst & Young. Con este galardón, la organización reconoce la labor de aquellos directivos que “están superando los límites para hacer de Europa el próspero centro internacional de negocios que es hoy”. En el caso del presidente de BBK, el jurado seleccionador ha valorado la puesta en marcha y ejecución de una estrategia de competitividad sostenible totalmente alineada con los Objetivos de desarrollo Sostenible de la Agenda 2030. Asimismo, ha destacado la gran repercusión internacional de la campaña Bihar: elegir el mañana, con la que la Fundación BBK lanzó el nuevo modelo de gestión impulsado por Sagredo. 

El portavoz de campaña de Sumar, Ernest Urtasun, defendió ayer en rueda de prensa la propuesta lanzada la víspera por la líder de la candidatura, Yolanda Díaz, de crear una ayuda universal de 20.000 euros para formación o emprendimiento, que recibirían, una única vez, los jóvenes que cada año cumplieran la mayoría de edad (aunque el dinero lo cobrarían cinco años después: al cumplir 23). La medida, una de las promesas estrella del programa de la nueva coalición de izquierdas, había sido cuestionada por la mañana por la vicepresidenta primera del Gobierno, Nadia Calviño, que sugirió que no está en la línea de una política fiscal “responsable”. Urtasun la reivindicó, asegurando que ya figuraba en el documento España 2050, elaborado por La Moncloa y presentado por el presidente Pedro Sánchez en mayo de 2021: “La cuestión de la herencia universal era una medida incluida en el proyecto de prospectiva hacia el año 2050. No sé si la señora Calviño tuvo algo que ver, pero imagino que sí”, dijo el también eurodiputado de Unidas Podemos. “Esta desigual distribución de las herencias afecta de manera decisiva a la equidad entre las generaciones jóvenes. Una propuesta novedosa para contribuir a que este fenómeno no se agudice en el futuro es la posible creación de una herencia pública universal; una dotación económica que todos los jóvenes del país recibirían una vez alcanzada una cierta edad”, rezaba ese documento de La Moncloa. “Quien proponga medidas que consistan en dar subvenciones, ayudas, así, sin ningún tipo de restricción ni nivel de renta ni un objetivo concreto, tiene que explicar cómo lo financiaría, porque en los próximos años tenemos que seguir con una política fiscal responsable”, había dicho horas antes Nadia Calviño, sin entrar en la iniciativa concreta. 

El presidente de CEOE, Antonio Garamendi, pidió ayer que “ciertas” propuestas electorales de cara a las elecciones generales del 23 de julio se hagan “con más seriedad”. En concreto, se refirió a las medidas anunciadas este fin de semana por la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, quien sugirió dotar con 20.000 euros a los jóvenes para formarse o emprender. En declaraciones a la prensa tras asistir al desayuno informativo del Foro de la Nueva Economía, Garamendi instó a “estudiar las cuentas” antes de hacer propuestas como la de Díaz, cuyo coste sumaría 9.000 millones de euros, el equivalente a la suma de los presupuestos de los Ministerios de Educación y Sanidad. “Se ha oído una medida de 20.000 euros para la gente joven. El coste de la medida asciende a los 9.000 millones de euros. Esto equivale a los 6.000 millones de euros del presupuesto del Ministerio de Educación y Formación para este año. Y 3.000 millones, si ven las cuentas del Estado, del presupuesto del Ministerio de Sanidad. En resumen, esa medida supone todo el presupuesto de ambos ministerios”, detalló Garamendi. El presidente de la patronal pidió que los candidatos a la presidencia estudien las cuentas del Estado antes de dar a conocer sus propuestas, y que lo hagan con “seriedad”. Preguntado por las palabras del presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, sobre que respetará la reforma laboral si llega al Gobierno, Garamendi dejó claro que “nunca” ha oído al líder de los populares decir que iba a derogar dicha reforma. “Es un acuerdo al que llegamos con los sindicatos. Como siempre, puede haber retoques, pero yo creo que el señor Feijóo lo que ha dicho es que dentro del diálogo social se puede hablar”, apuntó. Para el representante de los empresarios, la postura del PP es algo “normal”, no como lo que ha dicho la actual ministra de Trabajo, de que las empresas deben “pagar lo mismo trabajando una hora menos” justo cuando se acaba de llegar a un acuerdo con los sindicatos. “Eso sí que es saltarse el diálogo social”, denunció.

La contracción de la financiación bancaria por la subida de los tipos de interés coge mayor tracción con unas entidades más estrictas en la concesión de préstamos, y familias y empresas incapaces de asumir su encarecimiento. El crédito a los hogares cayó un 1,4% en mayo, hasta los 689.251 millones de euros. En el último año se ha reducido en más de 13.700 millones, según el Banco de España. Además, hay un cerrojazo en las hipotecas frente a una mayor apertura al crédito al consumo del que las familias tiran para llegar a fin de mes y afrontar el periodo estival con más holgura. Por segmentos, el frenazo inmobiliario provocó que el crédito hipotecario –el 73,2% de la deuda total de los hogares– cayera en 13.000 millones de euros en mayo, hasta los 504.601. Esa reducción del saldo vivo se debe también a la amortización que muchas familias acometen para esquivar la subida del euríbor. Frente a este escenario, el crédito al consumo mantiene su resistencia con un crecimiento del 3,4% interanual, hasta los 96.208 millones de euros, sin un solo mes con caídas. Aun así, la restricción general es evidente. Y lo que hasta hace poco se limitaba al segmento de las familias empieza a trasladarse con dureza a las empresas. Tras seis meses consecutivos de descensos moderados, el crédito para estos clientes aceleró su caída al 3% en mayo, con un saldo vivo de 468.029 millones de euros.

Entrevista con José Luis Escrivá, ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. "Cuando hay incentivos económicos atractivos, la gente decide prolongar su actividad. En segundo lugar, establecimos dos opciones. La primera, el 75% de la pensión con un salario de trabajo con jornada a tiempo parcial. La segunda, la misma cuantía de la pensión con un salario de trabajo con jornada completa...Sobre las subidas del SMI, primero, nos adherimos a la recomendación de la OIT que es muy firme a este respecto. Si uno quiere que ese compromiso sea más fuerte, el siguiente paso es hacerlo parte del marco legislativo. Segunda reflexión: se ha demostrado que éste es el mecanismo más potente de distribución de rentas que existe en un país que tiene un problema de desigualdad salarial como no hay en ningún otro país europeo. Tercero: creo que se va a demostrar que son dudas poco justificadas las que tenían algunos sobre el impacto del SMI en el empleo. Así se ha puesto de manifiesto en el comportamiento de la contratación y el mercado de trabajo en los últimos tres años en España. Y, en ese sentido, se validan mecanismos que nos demuestran que la subida del SMI es favorable para la creación de empleo. Esto no quiere decir que en todas las empresas y en todos los sectores no pueda haber algún efecto. Pero hay que hacer un análisis global...Este año, el déficit será del 0,4% del PIB, menos de lo previsto ya que la recaudación está comportándose mejor de lo esperado, superando las previsiones de recaudación en 1.500 millones de euros. Si no hubiésemos tenido una revalorización del 8,5% en las pensiones, la Seguridad Social ya hubiera registrado superávit este año. Y lo más importante es ver la evolución del déficit de la Seguridad Social..."

Continuación de la entrevista con Escrivá. "Reducir la tasa de paro 5 o 6 puntos es perfectamente posible siempre que trabajemos en la formación de los trabajadores...Ese es el gran problema del mercado de trabajo español: una formación bien focalizada en los trabajadores que más la necesitan. Por ejemplo, tenemos un nivel de paro muy elevado entre los mayores de 50 años. Y estas personas necesitan que la formación se adapte a sus necesidades. Lo que estamos haciendo al poner en marcha microcredenciales con las universidades es una iniciativa que tiene mucho recorrido. Hay que pensar que las personas que se quedaron en paro en la crisis económica, o por los cambios tecnológicos, requieren una recapacitación y hay que reorientar la formación hacia ellas. Y, a la vez, también hay que trabajar mucho más con los jóvenes. A partir de septiembre o de octubre va a haber 1,2 millones de jóvenes con formación dual, que tiene un gran potencial porque se forman en las empresas [con la combinación de la teoría y la práctica]. España tiene un tejido muy grande de pequeñas y medianas empresas y a veces es complicado hacer compatible la teoría con la práctica en la empresa. Hemos visto en otros países que estos trabajadores tienen mentores que les ayudan a desenvolverse en las empresas...Por una parte, hay que dar opciones a todos los nacionales [a encontrar trabajo], pero, al mismo tiempo, en el mundo hay trabajos que son extraordinariamente escasos. Y hay una competencia por el talento en todo el mundo. Eso va a prevalecer unos cuantos años. Estas iniciativas pueden dar fruto a lo largo del tiempo. Pero, al mismo tiempo, a veces faltan trabajadores especializados como estamos hablando ahora: electricistas, conductores de grúas, etc. Son profesiones donde la capacidad de que el empleo nacional cubra la demanda es muy limitada y por eso tenemos que abrir esas posibilidades..."

El Banco Central Europeo (BCE) avisa sobre los riesgos de intervenir el precio de los depósitos. La institución considera que establecer por ley una remuneración obligatoria del ahorro podría tener efectos negativos sobre la banca y la estabilidad financiera. Así se desprende de un dictamen emitido la semana pasada por el BCE, con motivo de un cambio legislativo acordado por el Gobierno belga para establecer un mínimo en los tipos de interés que los bancos pagan a los particulares por la liquidez. El desfase entre el precio del dinero y la rentabilidad que las entidades ofrecen por el pasivo está llevando a distintos países europeos a analizar medidas en este ámbito. En España, el último movimiento se produjo el pasado jueves. La vicepresidenta primera, Nadia Calviño, anunció que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y el Banco de España analizarán si existen factores que están impidiendo a la banca remunerar los depósitos. Calviño también señaló que el Gobierno estudia reformar la ley para dar más poder a la CNMC en este campo. El Gobierno belga fundamenta la iniciativa en argumentos que también están actualmente en el centro del debate público en España.

De París a Cannes, pasando por L’Haÿ-les-Roses y Nanterre. Alcaldes, políticos y ciudadanos se concentraron ayer delante de los ayuntamientos de toda Francia para decir «no» a la violencia tras una semana de disturbios y saqueos por la muerte el pasado martes en Nanterre de Nahel, un joven de 17 años abatido por la Policía de un disparo. ‘Juntos por la República’ rezaba la pancarta que encabezaba la marcha de L’Haÿ-les-Roses en apoyo de su alcalde, Vincent Jeanbrun, y su familia, víctimas de un ataque en su propio domicilio. Durante los disturbios desconocidos empotraron este fin de semana un vehículo contra su casa y lo incendiaron cuando su mujer y sus hijos, de 5 y 7 años, dormían en el interior. Su esposa resultó herida. La Fiscalía ha abierto una investigación por intento de asesinato. «Estos últimos días han sido los peores de mi vida», reconoció el regidor, que calificó de «asesinos» a los que atacaron su hogar y trataron de «quemar vivos» a su mujer y sus dos pequeños. «Más que nunca, nuestra República y sus servidores son amenazados y atacados. En realidad, es la democracia misma la que es atacada», denunció Jeanbrun, que agradeció los mensajes de apoyo. «Esto no puede durar, no durará», se mostró convencido el alcalde de L’Haÿ-les-Roses. «Stop, basta», añadió. «Basta, basta», gritaron los habitantes de esta localidad a las afueras de París. 

El 23-J cambiará drásticamente la fotografía de las generales de 2019. Si entonces el PNV ganó en los tres territorios, ahora los jeltzales solo lograrían la victoria en Bizkaia, mientras EH Bildu se impondría con holgura en Gipuzkoa y el PSE lo haría en Álava. Así lo refleja el Sociómetro, que prevé un triple empate a cinco escaños entre el PNV, Bildu y PSE. El 23-J cambia sustancialmente la fotografía que dejaron las generales del 10 de noviembre de 2019 en Euskadi. Si entonces el PNV acreditó su hegemonía con una victoria contundente en los tres territorios, en unos comicios tradicionalmente más complicados para las fuerzas periféricas, en la próxima cita con las urnas los jeltzales sólo lograrían la victoria en su feudo vizcaíno, mientras que EH Bildu ganaría las elecciones con gran holgura en Gipuzkoa y el PSE-EE se impondría en Álava. La traducción en escaños de ese panorama electoral, nada homogéneo, es un triple empate a cinco escaños entre los jeltzales, los socialistas y la izquierda abertzale, según los datos del Sociómetro que el Gabinete de Prospección Sociológica del Gobierno vasco hizo públicos ayer. Eso supone que las dos fuerzas de izquierdas mejorarían sus resultados al sumar un escaño más cada una y Sabin Etxea los empeoraría al perder uno de sus tres diputados por Bizkaia. La representación vasca en el Congreso se completaría con dos diputados del PP, que recuperaría así el que perdió por Álava hace cuatro años, y uno de Sumar, que se desploma respecto a los resultados obtenidos por Elkarrekin Podemos –obtuvo tres diputados, uno por cada territorio– y conserva únicamente su representante por Bizkaia.