20180102

El lehendakari, Iñigo Urkullu, eligió su tono más conciliador para el tradicional mensaje de fin de año que se emitió el domingo desde Ajuria Enea, en el que evitó cualquier alusión a la crisis política que vive Cataluña y pasó de puntillas sobre el futuro del autogobierno vasco. El lehendakari se limitó a apostar por «una Euskadi que defiende, profundiza y actualiza nuestro autogobierno singular», pero sin referirse concretamente ni al nuevo estatus ni al derecho a decidir que defiende el PNV, quizá para no provocar tensiones con su socio de gobierno. El mensaje de Urkullu apenas ofreció titulares de corte político y estuvo más centrado en lo social. Urkullu quiso dejar claro que el principal reto del Gobierno Vasco para 2018 será impulsar el «empleo de calidad». «Es el objetivo más sentido», llegó a afirmar Urkullu, que también destacó la importancia de mantener el crecimiento económico y la «protección social a quien más lo necesita».

El Gobierno está presionando a los presidentes de CEOE, Juan Rosell, y de Cepyme, Antonio Garamendi, para que pacten con los sindicatos una subida de los salarios relevante para los dos próximos años. Mayor alegría en los convenios. En consonancia con la Comisión Europea, el Gobierno calcula que la subida media de los precios este año rondará el 2%, hasta moderarse al 1,4%, en 2019, y al 1,5%, en 2020. De hecho, el presidente, Mariano Rajoy, reconoce que ha hecho una llamada para que suban las retribuciones de los trabajadores en los próximos años, con su acuerdo con la patronal y los sindicatos para que el Salario Mínimo Interprofesional suba un 4%, en 2018, y hasta el 20% en 2020.

La economía española ha mantenido firme el timón del crecimiento durante los últimos años, con un crecimiento superior al 3% en 2015, 2016 y 2017, sorteando la incertidumbre generada por la irrupción de Podemos y las dificultades para formar Gobierno, que condujeron a nuevas elecciones. En este periodo, la economía ha hecho frente, con éxito, a la falta de pulso reformista, a la debilidad del comercio global y a la ralentización de la eurozona. Sin embargo, en 2018 la actividad encara un nuevo desafío: la crisis secesionista catalana. Y sobre esto hay mucha incertidumbre, ya que todo depende de cómo afronte la situación el nuevo Ejecutivo regional. Si las tensiones entre la Generalitat y la Administración Central amainan, el procés apenas restará unas décimas al PIB nacional, mientras que de incrementarse podrán frenar a la mitad el crecimiento de la economía. La parte positiva es que la activación del artículo 155 ha logrado minimizar las turbulencias.

El ministro de Economía, Luis de Guindos, cifró ayer en unos 1.000 millones el coste que ha tenido el proceso soberanista para la economía catalana durante el cuarto trimestre. En una entrevista con la cadena SER, Guindos explicó que el crecimiento de Cataluña se ha desacelerado en unas cuatro o cinco décimas, desde una tasa del entorno del 0,9% hasta el 0,4%. «El PIB de Cataluña son unos 200.000 millones de euros, aplique el 0,4% o 0,5%, y eso supone que ha podido costar perfectamente ya unos 1.000 millones de euros», señaló.

La huelga convocada por el Comité Nacional del Transporte por Carretera comenzó durante la pasada madrugada y se prolongará hasta la medianoche del próximo viernes. El paro no está secundado por empresas y autónomos guipuzcoanos y afectará al suministro de productos y al tránsito de vehículos pesados a través de la red viaria guipuzcoana. El motivo de esta convocatoria de huelga se basa en el establecimiento de un peaje para camiones en los tramos guipuzcoanos de la N-1 y una parte de la A-15, a partir del próximo martes 9 de enero. Gipuzkoa vivirá cuatro días de paro que pondrán a prueba el normal abastecimiento del territorio.

Son proyectos en marcha con diferentes grados de madurez y que miran al horizonte con buenas perspectivas. Empresas con un perfil muy diferenciado, pero que coinciden en que ha llegado el momento de dar un salto con una longitud, eso sí, adaptada a las necesidades y modelo de desarrollo de cada una. Jeremías, nacida justo cuando se iniciaba la crisis y que acaba de cumplir diez años tras haber multiplicado por 22 su plantilla, está especializada en la fabricación de chimeneas industriales. Urban Biko dio sus primeros pasos en 2011 tras detectar las oportunidades que ofrecía un terreno comercial hasta entonces virgen en Bilbao, la movilidad urbana en bicicleta y está muy enfocada hacia la bici eléctrica. El último invitado apenas tiene ocho meses de vida. Es Addilan, una compañía de máquina herramienta especializada en fabricación aditiva que está a punto de entregar su primer pedido. Tres ejemplos dispares que ponen rostro y voz a las miles de empresas activas que son las que mueven los engranajes de la economía vasca hoy y lo harán en el futuro.

La llegada de 2018 también ha traído la prórroga automática de los Presupuestos Generales del Estado de 2017. Un escenario que empieza a ser una tradición, pues también se produjo el ejercicio pasado. Si entonces el motivo fue la dificultad para formar Gobierno en España tras las elecciones de diciembre de 2015 y su repetición en junio de 2016, ahora se debe a la crisis de Cataluña y la imposibilidad del Ejecutivo de Rajoy de contar con aliados parlamentarios, hasta que se normalice la situación política en aquella comunidad. Por tanto, mientras se negocian unas nuevas cuentas nacionales se mantienen prorrogadas las del año anterior. Una circunstancia que tiene varios efectos colaterales. Entre ellos, que impide la subida salarial para los empleados públicos y también la bajada del IVA del cine del 21% al 10%.

La ampliación durante un año más de la tarifa plana de 50 euros de cotización a la Seguridad Social para nuevos autónomos beneficiará a 140.500 personas durante 2018, que se ahorrarán un total de 202,4 millones de euros. Según las previsiones que desgrana el Ministerio de Empleo en un comunicado, también a partir de ayer, 1 de enero, se reduce de cinco a dos años el requisito de no haber estado de alta como autónomo para acceder a la reducción, que ya ha beneficiado a más de 1,3 millones de trabajadores por cuenta propia desde que entró en vigor la medida en 2013. De esta forma, los trabajadores que se den de alta como nuevos autónomos pueden acogerse a la tarifa plana de 50 euros, una reducción que se extiende hasta 24 meses, con un descuento del 50% los siguientes seis meses y del 30%, los otros seis meses.

Buen cierre del año para el mercado de turismos y todoterrenos en España. Las matriculaciones crecieron un 7,6% durante el año pasado para cerrar con 1.235.594 unidades, según los datos de la Dirección General de Tráfico (DGT) recogidos por la consultora AutoInfor. Diciembre cerró con 102.943 ventas y un alza del 6,2% con respecto al mismo mes de 2016. A pesar de que el crecimiento del mercado está por debajo de los dos dígitos obtenidos en 2016, las cifras finales mejoran la previsión de comienzo de año del sector que auguraba un incremento del 5%. La crisis en Cataluña y la incertidumbre que ha generado no ha pasado factura al sector.

El Gobierno chino hace todo lo posible para que el futuro de su industria automovilística sea eléctrico. Por el lado de la oferta se han tomado medidas agresivas: a partir de 2019, cualquiera que produzca o importe en China más de 30.000 vehículos deberá asegurarse que al menos un 10% sean eléctricos o híbridos enchufables. Esta cifra ascenderá a un 12% en 2020 y está previsto que siga subiendo. Los que no estén en condiciones de cumplir con las cuotas deberán comprar créditos a aquellos que las sobrepasen, pagar multas o abandonar el mercado.

Acaba de dejar la empresa que ha presidido durante los últimos 26 años y aún cree que la siderurgia puede tener futuro en el País Vasco, pese a los costes laborales o el precio de la energía, que hacen pensar que este sector está condenado a deslocalizarse a otros lugares del planeta. Pedro Abásolo, hasta la pasada semana presidente de la firma alavesa Tubos Reunidos, está convencido de que ese futuro, sin embargo, hay que apoyarlo en una forma distinta de hacer las cosas y, sobre todo, desde una perspectiva diferente en cuanto al tamaño de las empresas. El tamaño, la necesidad de ganar sinergias, se ha convertido en una obligación, opina.

Los seis meses de Yanis Varoufakis al frente del Ministerio de Finanzas de Grecia lo convirtieron en una celebridad global, en una suerte de estrella del rock de la política económica. La troika afirma que su gestión le costó a Grecia 100.000 millones de euros. Lo más suave que dicen sus críticos es que se trata de un intelectual cuya inmersión en la política, más allá de la fama, puede calificarse como mediocre. Varoufakis acaba de responder a sus censores con un ejercicio de funambulismo literario: Comportarse como adultos, que en España acaba de publicar Deusto, ofrece una mirada única a las entretelas de Bruselas y es, sin duda, uno de los libros del año. El exministro conserva una lengua venenosa y es dueño de un análisis demoledor para Europa. «No se engañen, la crisis sigue ahí; el euro corre peligro», embiste en esta entrevista.